“Ayer perdimos a un auténtico defensor de la fe y la libertad”, afirmó Orbán en la red social X, antes de agregar que “la muerte de Charlie Kirk “es el resultado de la campaña internacional de odio emprendida por la izquierda progresista y liberal”.
En este contexto, comparó el asesinato de Kirk ayer en un campus universitario del Estado de Utah con los que sufrieron los líderes nacionalistas eslovaco, Robert Fico, y checo, Andrej Babis.
“¡Debemos detener el odio! ¡Debemos detener a la izquierda que incita al odio!”, exclamó Orbán, un cercano aliado del presidente estadounidense Donald Trump.
Trump aseguró tras el ataque a Kirk que su Gobierno “perseguirá a los culpables” y describió al fallecido como “un patriota y defensor de la libertad de expresión”.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Lea más: La búsqueda del asesino de Kirk prosigue con un llamamiento a la colaboración ciudadana
El presidente de EE.UU. culpó a la retórica de la izquierda radical por “esta violencia”.

Kirk, de 31 años, era fundador de Turning Point USA, una influyente organización conservadora enfocada en el activismo universitario.
El activista era en una de las voces más reconocidas del movimiento conservador juvenil en Estados Unidos, cercano a Trump.
El primer ministro eslovaco, Fico, sufrió graves heridas en mayo de 2024 al ser tiroteado, mientras que el exjefe del Gobierno checo, Babis, fue fue golpeado en la cabeza con una muleta el pasado 1 de septiembre.