En los enfrentamientos con el Ejército perdieron también la vida 66 terroristas, según las cifras facilitadas por las autoridades del país centroafricano.
Sin embargo, fuentes de las fuerzas de seguridad camerunesas aseguraron a Efe que 21 soldados y 16 civiles fallecieron en la ofensiva de los yihadistas.
El atentado ocurrió a primera hora de este lunes en la ciudad de Darak, cerca del lago Chad y la frontera con Nigeria, precisaron las citadas fuentes.
Según medios locales, los terroristas de Boko Haram atacaron dependencias del Ejército en la citada urbe en la madrugada del lunes, y robaron material informático, armas y municiones.
Después, los yihadistas dispararon contra civiles en la localidad, donde saquearon varias casas y tiendas.
Los enfrentamientos con los soldados cameruneses se prolongaron durante horas, hasta la tarde del mismo lunes.
Se trata de uno de los peores ataques terroristas que sufre Camerún desde comienzos de año.
Pese a los esfuerzos de las fuerzas de seguridad camerunesas, Boko Haram aún sigue perpetrando atentados en Camerún.
Boko Haram, que significa en lenguas locales “la educación no islámica es pecado”, lucha por imponer un Estado islámico en Nigeria y pretende convertir el área del lago Chad -que también comprende territorios de Níger, Chad y Camerún- en su nuevo bastión.
Desde 2009, en Nigeria, desde donde lanza ataques a los países fronterizos, el grupo yihadista ha causado la muerte de al menos 20.000 personas.
En Camerún, los asesinatos en estos años ascienden a más de 3.000, pero también hay más de 200.000 desplazados internos.
Una fuerza conjunta multinacional integrada por Nigeria, Níger, Camerún y Chad ha debilitado considerablemente la insurgencia de Boko Haram, aunque los yihadistas aún lanzan ataques indiscriminados contra áreas sensibles.