Según confirmó la portavoz del CICR en el Yemen, Marie Claire Feghali, podrán mandar la ayuda por vía aérea a la capital yemení, Saná, aunque todavía no saben el día exacto debido a problemas logísticos.
Feghali explicó que tienen preparadas 48 toneladas de medicinas, material sanitario, tiendas de campaña e instrumentos para purificar agua, entre otros.
La autorización ha tardado mucho, a su juicio, debido a la necesidad de determinar un trayecto seguro para el avión y garantizar que no se van a producir ataques.
La portavoz agregó que contactaron con “varias partes internacionales”, y que las autoridades saudíes y yemeníes fueron las que dieron la aprobación final.
No está claro todavía si la ayuda será transportada, dependiendo de las necesidades, en uno o varios aviones, que saldrán de Ginebra y harán escala en Ammán, antes de dirigirse a Saná.
Arabia Saudí lidera la coalición árabe que controla el espacio aéreo del Yemen y que mantiene desde hace doce días una operación militar de bombardeos aéreos contra los rebeldes hutíes.
Ayer, el portavoz de la coalición, el general saudí Ahmad Asiri, explicó que se acordó con el CICR el suministro de la ayuda el domingo, pero que el organismo humanitario pidió aplazar el envío.
Por otro lado, Feghali señaló en su cuenta de Twitter que están esperando también el permiso para enviar personal médico en barco a la ciudad de Adén, en el sur del país y escenario de duros combates entre los hutíes y las fuerzas leales al presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi.
En su comunicado de hace dos días, el CICR denunció que, pese a los intensos esfuerzos y repetidos contactos con “ambos bandos”, no había sido aún posible llevar el personal y material sanitario necesario a la zona.
Desde que comenzaron los bombardeos de la coalición árabe y se recrudecieron los combates, tres miembros de la Media Luna Roja han perdido la vida en ataques perpetrados cuando acudían a ayudar a los heridos. La situación es especialmente grave en Adén, donde los rebeldes hutíes han logrado avances en sus posiciones en los últimos dos días, pese a que frenar a este grupo en esa ciudad era una de las prioridades de la coalición árabe.