Se trata de imágenes tomadas supuestamente por una cámara de seguridad y divulgadas por Telefé, en las que se ve la secuencia de la noche en que López, en torno a las 3.00 hora local (6.00 GMT) llega cargado con bultos al monasterio Nuestra Señora de Fátima, en General Rodríguez, a unos 50 kilómetros al oeste de Buenos Aires.
En la filmación, que registra la puerta interior del convento, se muestra cómo López, secretario de Obras Públicas durante los Gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández (2003-2015), deja dos bolsos en la puerta y el arma larga, calibre 22 -que posteriormente le fue incautada- al lado, tras lo que llama al timbre.
Luego, se vislumbra a una de las monjas que habitan el convento abrir la verja y colar por una rendija las bolsas mientras el exfuncionario va a por más.
En la filmación se observa cómo López abandona después el edificio principal del monasterio, sin retirar el arma del suelo junto a la puerta, y la posterior llegada de la Policía, que se sorprende al ver el fusil.
El mismo 14 de junio se conoció que López fue detenido al ser pillado “in fraganti” por los agentes, luego de que un vecino de la zona del convento, en un barrio de casas bajas y calles de tierra, alertara por teléfono a los efectivos al ver movimientos sospechosos en el lugar de madrugada.
El vecino denunció ver un automóvil “sospechoso” frente al monasterio y según precisó entonces el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, la Policía llegó a los pocos minutos al lugar y encontró a López parado junto al vehículo, “arrojando bolsos” por arriba del muro del monasterio, y, al ver el patrullero, “se metió en el convento”.
En los bolsos se halló en torno a 8,9 millones de dólares en distintas divisas, así como seis relojes de lujo y el fusil, cuyo permiso para ser portado López tenía vencido.
Según el Gobierno provincial, López tenía “acceso libre” al monasterio y las monjas del lugar, de avanzada edad, declararon que iba con frecuencia, al igual que el exministro de Planificación Julio de Vido y “otros exfuncionarios” del kirchnerismo.
López, de 55 años, quedó detenido por presunto lavado de dinero y por portar un arma sin un permiso vigente, aunque el exfuncionario era investigado desde hace ocho años por presunto enriquecimiento ilícito.
Desde los hechos del convento, el exjerarca permanece detenido en la cárcel bonaerense de Ezeiza, a la espera de someterse a juicio oral y en todas estas semanas la controversia por lo sucedido ha levantado una fuerte polémica en el país y sacudió el seno del kirchnerismo.
“Sentí vergüenza, indignación. Fue como un golpe al estómago. Por eso insisto que es necesario que se revisen todos los contratos de obra pública. Este caso demuestra que es necesario hacer esa auditoría”, enfatizó Cristina Fernández en una reciente entrevista.