El acto, que se celebró en el Estadio del Ejército en la zona de Banani de Dacca, comenzó hacia las 10.00, hora local (4.00 GMT) , con el saludo de Hasina a familiares de las víctimas y a representantes de sus países de origen: Italia, Japón, Estados Unidos y la India.
A continuación, la mandataria depositó una corona de flores sobre una placa en honor a los fallecidos colocada frente a un pequeño escenario con las banderas de Bangladesh y los otros cuatro países afectados, según las imágenes difundidas en directo por las televisiones locales.
Hasina, fuertemente escoltada, abandonó de inmediato el estadio y tras su marcha representantes diplomáticos y familiares de las víctimas rindieron también tributo a los 9 italianos, 7 japoneses, 4 bangladesíes, un estadounidense y una india fallecidos.
Los restos mortales de los dos policías ya han sido enterrados, mientras que los actos fúnebres por las otras 20 víctimas civiles tendrán lugar cuando sean entregados a sus familiares y, en muchos de los casos, repatriados a sus países de origen.
Hoy es el segundo día de duelo nacional tras el asalto yihadista perpetrado por 7 atacantes (6 de los cuales murieron y uno fue arrestado) al restaurante Holey Artisan, que se encuentra en la zona diplomática de Dacca y es frecuentado por numerosos extranjeros.
La Policía ha confirmado que los 7 atacantes eran bangladeshíes y 5 de ellos estaban siendo buscados.
El asalto, que terminó el sábado tras extenderse durante doce horas, fue reivindicado tanto por el Estado Islámico (EI) como por la rama de Al Qaeda en el subcontinente indio, pero las autoridades bangladeshíes mantienen que este tipo de ataques son obra de grupos locales.
Bangladesh está inmerso en una ola de atentados selectivos de corte islamista desde 2013, aunque no sufría grandes ataques terroristas desde la pasada década. Las agresiones selectivas se intensificaron en 2015 contra minorías religiosas, activistas homosexuales, pensadores laicos y extranjeros.