Esa declaración del órgano legislativo del Mercosur, que reúne a parlamentarios de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, centró los debates de su XXXI sesión ordinaria que se realizó en su sede de Montevideo.
El Parlasur pidió así una solución “que no comprometa el amplio proceso de reestructuración” de la deuda soberana argentina tras la decisión de la Suprema Corte de Justicia de los EE.UU. que obligó a Buenos Aires a pagar la deuda que mantenía con acreedores que no se acogieron a la reestructuración y que puso de nuevo al país en riesgo de caer en una suspensión de pagos.
Además, el organismo pidió a los presidentes del Mercosur a liderar una discusión sobre “las deudas externas soberanas en las esferas competentes a nivel mundial”.
Argentina reestructuró en 2005 y 2010 la deuda que mantenía con el 92 % de los acreedores a los que dejó de pagar tras la crisis de 2002, si bien un grupo de éstos se negó a canjear su deuda y emprendió acciones legales para exigir su pago completo.
La Justicia de EE.UU. le terminó dando la razón a estos acreedores y obligó a pagar las deudas al mismo tiempo que a los tenedores de bonos que ingresaron en el canje de la deuda externa.
Las condiciones de la sentencia dificultan que Argentina siga pagando a los acreedores que sí aceptaron la reestructuración si no se paga antes a los fondos buitre, que representan el 1 % de los acreedores, por lo que el país quedó en peligro de entrar en una cesación de pagos.
Precisamente hoy el ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, llegó a Nueva York encabezando una comitiva para negociar con los fondos especulativos el pago de la deuda de 1.300 millones de dólares.
Durante la sesión, varios parlamentarios de diversos países del Mercosur expresaron su apoyo al Gobierno argentino y señalaron, como indicó el brasileño Roberto Requião, que “defender a Argentina en este momento” es defender a todos ellos.
Otros, como el uruguayo Alberto Curiel, del oficialista Frente Amplio, apuntó que al oponerse a la presión de los fondos especuladores, de lo que se trata es “ defender a los pueblos de un ” capitalismo financiero, donde lo financiero predomina sobre lo productivo, donde los acreedores financieros presionan a personas y naciones para sacar beneficios “ .
"La unidad latinoamericana es fundamental a la hora de enfrentar a estos acreedores especulativos", sentenció Curiel.
El parlamentario venezolano Saúl Ortega cargó además contra la Justicia norteamericana, que a su juicio ”ni es justa ni libre“ y que busca tan solo ”generar situaciones de inestabilidad social y económica en Argentina“.
”Esa es la injerencia que los EE.UU aplica en la región. Por esto es que expresamos nuestro apoyo al pueblo y al gobierno argentino“, añadió.
El representante argentino Guillermo Carmona, uno de los impulsores de la propuesta de declaración, aprovechó su intervención para agradecer la solidaridad de todas las delegaciones que están representadas en el Parlamento del Mercosur por su” inusitada y cada vez más firme hermandad con el pueblo y el Gobierno argentino en una situación tan delicada como esta".