En un comunicado destinado a la Securities and Exchange Commission enviado el jueves, Wal-Mart dijo que las investigaciones del Departamento de Justicia, la SEC y el gobierno mexicano posiblemente expongan a la empresa a una “serie de consecuencias negativas”.
Wal-Mart fue acusado de pagar sobornos por un total de 24 millones de dólares para obtener permisos de construcción de tiendas en México.
“El grupo está en una fase preliminar de evaluación y de respuesta a las investigaciones gubernamentales, a las quejas de los accionistas y su investigación interna todavía está en marcha”, destacó Wal-Mart en el documento.
“Si bien la empresa no cree actualmente que sus problemas puedan tener un impacto negativo importante para sus actividades, dada la incertidumbre propia de la situación, la compañía no puede otorgar ninguna seguridad de que estos problemas no tengan un impacto significativo en sus actividades futuras”, destaca.
Wal-Mart destacó que podría ser objeto de “muchos procesos por este problema” que podrían derivar en “juicios, acuerdos amistosos, demandas, mandatos conminatorios, órdenes de cese, condenas en el orden de lo penal”.
“Las quejas de los accionistas podrían desembocar en juicios contra los administradores y los responsables presentes y pasados incluidos en el procedimiento”, dijo, agregando que estas personas deberían entonces dedicar tiempo a los procesos judiciales en detrimento de la gestión de la empresa.