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Los ministros de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Jiménez Rolón, César Garay y Antonio Martínez Simón resolvieron ayer confirmar la sentencia en un histórico juicio de indemnización de daño moral por la muerte de una mascota.
La pareja compuesta por Juan Carlos Klein y Claudia Patricia Vera demandó a la veterinaria La Quinta SA por la muerte de su perrita llamada “Mía”, en junio del 2012, y obtuvo la condena de G. 30 millones.
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Llevaron a la perrita a la veterinaria por mal aliento
De acuerdo a la demanda, la pareja llevó a dicha veterinaria a la mascota por mal aliento y solicitaron los servicios de limpieza de sarro y baño. Cuando regresaron, encontraron que había sido sometida a una intervención quirúrgica de tres dientes sin autorización de los propietarios y la herida no se había cerrado correctamente.
Al día siguiente, recibieron la comunicación de la muerte de la mascota y fueron informados de que posiblemente padecía leishmaniasis. En el juicio, la propietaria de la veterinaria alegó que los dientes no fueron extraídos sino que se “desprendieron de forma espontánea por el sarro” y afirmó que luego del procedimiento fue monitoreada cada 30 minutos, pero murió a las 2:45 del 2 de junio.
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No obstante, durante el proceso, un médico veterinario confirmó que Mía sufrió una hemorragia que se originó en la cavidad bucal y ello generó una descompensación y la muerte. No se confirmó ninguna condición médica preexistente que haya sido causante del desenlace fatal.