Conejos felices: guía completa para su cuidado y salud en el hogar

Los expertos advierten: mantener a los conejos enjaulados limita su bienestar. Para garantizar su salud, es fundamental proporcionarles un entorno enriquecido y atención especializada, lo que incluye higiene adecuada y una dieta equilibrada. ¿Cómo podés lograrlo?

Conejo.
Conejo.Shutterstock

La mayoría de las organizaciones especializadas, como House Rabbit Society (HRS) y la RSPCA, recomiendan que los conejos no vivan en jaulas cerradas. Necesitan tiempo de suelta diaria y un “corral” o habitación segura.

Planificá:

  • Mínimo 3-4 horas de ejercicio libre al día; idealmente, acceso casi permanente a un ambiente protegido.
  • Circuitos con túneles, cajas de cartón, plataformas bajas y escondites para reducir estrés y conductas destructivas.
  • Suelos con alfombras antideslizantes; los pisos lisos les generan inseguridad y problemas de movilidad.

Dieta urbana sin errores: el 80-90% es heno

Conejo.
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El pilar de la salud es el heno de gramíneas a libre demanda (timothy, orchard, avena). Según HRS y la World Small Animal Veterinary Association (WSAVA):

  • Verduras de hoja: aproximadamente 1 taza por kilo de peso corporal al día (mezclá variedades; evitá exceso de crucíferas si hay gases).
  • Pellets de alta fibra: 1-2 cucharadas por kilo, como complemento.
  • Evitá azúcares y harinas; las golosinas comerciales suelen ser innecesarias.
  • Agua fresca siempre disponible, en cuenco estable mejor que en bebedero de chupete.

Higiene y olores: arenero, no viruta aromática

Conejo.
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La mayoría aprende a usar arenero. Para reducir olores:

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  • Usá sustrato de papel reciclado o pellets de papel/madera no aromática. Evitá pino y cedro aromáticos por compuestos volátiles.
  • Colocá heno cerca o encima del arenero: comer y evacuar van de la mano.
  • Cambiá a diario las partes húmedas; limpieza completa 2-3 veces por semana.

Salud y veterinaria: urgencias que tenés que reconocer

Conejo.
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Vivir en ciudad facilita el acceso a veterinarios, pero no todos son especialistas en exóticos. Verificá credenciales y experiencia con lagomorfos.

  • Esterilización: reduce marcaje, peleas y riesgo de cáncer uterino en hembras (citado por AVMA y HRS).
  • Golpe de calor: por encima de 26-28 °C aumenta el riesgo; brindá ventilación, sombras y placas frías (no ventiladores apuntando directo).
  • Estasis gastrointestinal: si deja de comer o defecar por 8-12 horas, es urgencia.
  • Enfermedades prevenibles: en muchos países se recomienda vacunación contra RHDV2 (alta letalidad, reportada por la WOAH).

Convivencia y ruido: el “thumping” y los vecinos

Los conejos pueden golpear el suelo con las patas cuando se asustan. Si compartís muros:

  • Aislá la zona de descanso con alfombras o plataformas de goma.
  • Reducí estímulos súbitos: puertas que golpean, aspiradoras sin preaviso, música a alto volumen.
  • Rutina predecible: horarios estables bajan la reactividad.

Seguridad del hogar: cables, plantas y “mordisqueo”

Urbanistas del hogar coinciden: el cableado es el riesgo número uno.

  • Encauzá cables en canaletas y protectores; mantené cargadores fuera del piso.
  • Retirá plantas tóxicas (dieffenbachia, pothos, filodendro, lirio de la paz, entre otras).
  • Ofrecé alternativas de masticación: ramas seguras (manzano, peral sin tratar), juguetes de cartón y madera sin barniz.

Mobiliario y daños: prevenir sale más barato

  • Protegé zócalos y esquinas con esquineros de PVC o madera barata.
  • Cubrí sillones con fundas lavables; colocá rascadores y juguetes cerca de áreas tentadoras.
  • Reforzá hábitos positivos: premiá cuando mastica lo permitido; redirigí de inmediato si va a un cable o mueble.

Costos y tiempo: lo que rara vez se calcula

El gasto anual puede incluir heno de calidad, verduras frescas, pellets, arenero y controles veterinarios, más eventual esterilización y vacunas donde estén disponibles.

La tenencia responsable exige tiempo diario de interacción y limpieza, no solo “alimentar y listo”.

Normativa y comunidad: hablá antes, no después

Antes de firmar un contrato o mudarte:

  • Confirmá por escrito que las mascotas pequeñas están permitidas.
  • Conversá con vecinos sobre horarios de actividad del animal; la transparencia evita conflictos.
  • Considerá un seguro de responsabilidad civil si tu edificio lo solicita.

Si ya hay problemas, intervení en pasos

  • Identificá el disparador: ¿aburrimiento, ruido, calor, falta de baño?
  • Ajustá una variable por vez durante una semana para evaluar impacto.
  • Documentá con fotos y notas; facilita discutir con un veterinario o etólogo.

Cuándo pedir ayuda profesional

  • Marcaje persistente tras la esterilización.
  • Agresividad súbita o evitación del arenero sin causa aparente.
  • Pérdida de peso, diarrea, respiración ruidosa o dentición evidente (babeo, dejar de comer verduras fibrosas). Un veterinario de exóticos o un técnico en comportamiento conejil puede diseñar un plan a medida.
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