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El colegio Alvarín Romero, tradicional institución educativa pública del barrio Recoleta, sufre desde hace tiempo la necesidad de reparaciones en su infraestructura.
El edificio data del año 1961 y por su condición añosa sufre serios problemas en sus instalaciones eléctricas, en las canaletas de los techos y hasta hundimientos del piso de las aulas.
A esto se suma la falta de vidrios en muchas ventanas y el deterioro natural, por el paso del tiempo, de elementos de grifería que se observan, por ejemplo, en su laboratorio.
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Alvarín Romero: ministros habían prometido desembolso
Autoridades de la institución señalan que hace tiempo recibieron la visita de los ministros de Educación y Ciencias y de Obras Públicas, que se habían comprometido a realizar un desembolso de dinero para reparar estas cuestiones, pero hasta el momento no cumplieron.
El propio Luis Ramírez había admitido recientemente que más de 2.000 instituciones educativas se encuentran con falencias de infraestructura, algo que salta a la vista todos los días ante las denuncias de padres y docentes.
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