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El presidente de la Asociación de Yerbateros de Paso Yobai, Vidal Brítez, fue internado de urgencia en el Hospital Regional de Villarrica tras sufrir una descompensación mientras permanecía recluido en el calabozo de la Comisaría 5ta. de Ybaroty y esperando su traslado a la Penitenciaría Regional de Villarrica, en el marco de una orden de prisión preventiva.
El líder de los productores de yerba mate, quien está en el centro del conflicto entre yerbateros y mineros en Paso Yobai, permanece bajo observación médica.
Brítez fue detenido el miércoles 26 de marzo en Paso Yobai y, el viernes 28 de marzo, el Juez Penal de Garantías del 4to. Turno de Villarrica, Juan Antonio Ruíz Díaz Gamba, le impuso una medida de prisión preventiva. Sin embargo, antes de ser trasladado al penal, sufrió una crisis de salud y debió ser atendido de urgencia.
El dirigente, de 52 años, padece de asma, lo que podría haber causado su descompensación. Según informó el director del hospital, Dr. Néstor Petersen, a Brítez se le realizaron estudios como una tomografía y un electrocardiograma, cuyos resultados fueron normales. Aunque inicialmente se sospechaba un posible ACV o preinfarto, estas posibilidades han sido descartadas preliminarmente; no obstante, los estudios serán repetidos para confirmarlo.
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El caso de Vidal Brítez ha generado una fuerte reacción en Paso Yobai. Grupos de activistas, abogados defensores, así como la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), se han pronunciado y apelado la medida de prisión preventiva en busca de su revocación.
Alegan que Brítez es una figura reconocida en la comunidad, presidente de la Asociación de Yerbateros de Paso Yobai y con arraigo en la localidad, por lo que su prisión es innecesaria, ya que no existe una sospecha directa de que evitaría ser sometido al proceso judicial. Además, Codehupy agrega que la medida es desproporcionada y “representa un abuso de poder por parte del sistema judicial”.
El dirigente fue imputado por supuesta coacción grave tras un incidente en el que un grupo de yerbateros intentó frenar la instalación de nuevas canteras y piletas de lixiviación para la extracción de oro en una zona de cultivos de yerba mate. Brítez, sin embargo, niega haber estado presente en los enfrentamientos entre agricultores y mineros.
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El conflicto en Paso Yobai sigue escalando, con denuncias de daños ambientales por parte de los productores agrícolas afectados. Los yerbateros sostienen que la minería aurífera pone en riesgo sus cultivos y fuentes de agua, mientras que las empresas mineras defienden su derecho a operar en la zona.
La situación judicial de Brítez ahora dependerá de la revisión de su estado de salud y de los recursos presentados por su defensa. En tanto, grupos de yerbateros y comunidades indígenas de Paso Yobai preparan nuevas movilizaciones en caso de que no sea revocada la prisión preventiva para Brítez.
La justicia usada como garrote
Félix Alonso, vicepresidente de la Comisión Distrital de Emergencia Ambiental de Paso Yobai, lamentó que la justicia sea usada como garrote. Manifestó que la situación que atraviesa Brítez demuestra el sometimiento de la justicia a los sistemas mafiosos que operan en la explotación del oro en Paso Yobai.
“Pedimos su libertad, es lo más lógico, además ahora se agravó su estado de salud. Estamos luchando para que se pueda resolver esta situación para el bien de nuestro compatriota, que lucha por los derechos de todos los pobladores de Paso Yobai. Esto es un atropello, diría yo; el atropello a los derechos humanos por parte de la política judicial sucia”, aseveró Alonso.
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