Se estima que cada productor tuvo una pérdida de G. 10.000.000 y piden la asistencia del Gobierno Central para afrontar la crítica situación. El mayor perjuicio se registró en las infraestructuras de los invernaderos, cuyas membranas fueron desprendidas y destruidas por los vientos. También las mallas de media sombra quedaron rotas y totalmente inutilizables.
El productor Adrián Vázquez dijo que la tormenta afectó una franja de 300 metros y destruyó la infraestructura que se tenía para la plantación de locotes y tomates. Indicó que el mayor daño se registró en las plantaciones de mandioca, que fueron arrasadas por el viento.
Los plantines de diferentes hortalizas que se encuentran en desarrollo necesitan de los invernaderos o de las mallas de media sombra como método de protección.
La encargada de la Dirección de Extensión Agraria (DEAG) de Coronel Oviedo, Mirta Guerrero, manifestó que en la mañana de este lunes iniciaron el relevamiento de datos de la cantidad de productores afectados y que, hasta el momento, se constató que unas 17 familias registraron pérdidas de cultivos y de infraestructuras en sus fincas.
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Guerrero indicó que en el transcurso de esta tarde continuarán los trabajos y que todas las informaciones recabadas son cargadas en una aplicación web del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), para que las autoridades de la administración central puedan gestionar una rápida asistencia.