Los médicos especializados en cuidados intensivos pediátricos aseguran que es un campo poco atractivo por la falta de incentivo económico, a pesar, de haber sido beneficiados con la ley 7159/23 que “crea el programa de incentivos para el ejercicio profesional de la medicina en la especialidad de medicina crítica, cuidados intensivos y su equivalente en el sector público”.
“Exigir se cumpla con la remuneración correspondiente prevista en la misma, atendiendo que los recursos financieros fueron previstos en la ley 7408/24 de presupuesto general de la nación para el ejercicio fiscal 2025 y se han cumplido todos los pasos necesarios para el pleno cumplimiento de lo estipulado en la ley”, indica el documento.
El médico Diego Gamarra, coordinador de terapia intensiva del Hospital Pediátrico Acosta Ñu, manifestó que la Ley ya fue aprobada, pero que hasta el momento, no se está cumpliendo.
“La ley es para incentivar a los colegas recién recibidos a que adopten esta especialidad, de cuidados intensivos. Se aprobó en el 2023 y tendría que haber entrado en vigencia 90 días después, pero este es el momento en que aún no lo hizo”, indicó.
Agregó que se aprobaron los recursos para el ejercicio fiscal 2025 y que a seis meses de eso, el Ministerio de Salud ni siquiera cuenta con la lista oficial de los beneficiarios.
“Exigimos que el Ministerio de Salud ya culmine todo el proceso burocrático para que se pueda efectivizar la remuneración prevista”, especificó.
Dijo además, que desde hace diez años no cuentan con mejoras salariales, mientras que, el trabajo en la unidad de cuidados intensivos es muy demandante.
“Es poco atractiva. Este año se habilitaron ocho plazas para la formación de residentes de primer año de terapia intensiva en el Hospital Acosta Ñu, y en principio solo pudieron ingresar cuatro, luego de unos meses, ahora ingresaron dos más y quedan vacantes, porque la especialidad es poco atractiva, lo que genera un problema ante la alta demanda y la falta de médicos”, explicó.