Las bajas temperaturas registradas en la madrugada de este martes afectaron severamente a productores agrícolas y ganaderos del departamento de Ñeembucú.
El termómetro descendió hasta los 2 grados Celsius, con una sensación térmica de 0 grados, lo que generó escarchas que dañaron cultivos sensibles.
Uno de los sectores más golpeados fue el de la horticultura. A pesar de las medidas preventivas adoptadas, muchos cultivos no resistieron el impacto de las heladas.
La producción de batata, clave en esta zona por la calidad del suelo, también sufrió importantes daños.
Elizardo López, productor del asentamiento Belén, distrito de Tacuaras, expresó su preocupación por las consecuencias de las heladas.
“Muy grande fue la helada por aquí, por suerte, la humedad ayudó a amortiguar un poco el daño, pero igual se afectaron las hortalizas y más aún las batatas” expresó.
En la comunidad de Yaguarón, también en el distrito de Tacuaras, Elpidio Palacios, otro pequeño productor, lamentó la ausencia del Estado.
“Estamos solos. Con nuestro sudor y sacrificio intentamos salir adelante. Las autoridades no nos ayudan ni en la sequía ni ahora con el frío. Es muy difícil”, manifestó.
Palacios también advirtió que muchos pequeños productores comenzaron a vender sus animales ante la imposibilidad de mantenerlos.
“Si no vendemos, se nos van a morir. Es nuestro único recurso y tenemos que sobrevivir como podamos”, señaló, y añadió que la mayoría terminará endeudada con los bancos antes de fin de año.
En el sector ganadero, la situación no es menos alarmante. A las recientes lluvias que dejaron pasturas bajo agua, se suma ahora el efecto de las heladas, que quemaron el poco alimento disponible.
Jeraldo Rolls, ganadero de la zona, expresó su preocupación: “No hay fardos de heno en la zona, el ganado ya venía débil por las lluvias y ahora se suma el frío. Es muy difícil sostener la producción sin apoyo” sostuvo.
Los productores exigen una respuesta inmediata de las instituciones responsables, en especial del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Intentamos contactar con la encargada del MAG en Pilar, Bernarda Ramírez, pero no respondió nuestras llamadas ni mensajes telefónicos. Estamos abiertos en caso de que desee referirse a la situación presentada o a algún plan de apoyo a los afectados por el fenómeno natural.