Este lunes arrancan las vacaciones de invierno en las instituciones educativas del país, y para disfrutar del turismo interno, el departamento Central cuenta con atractivos naturales para disfrutar en familia.
La localidad de Ñemby, ubicada al sur de la región, cuenta con un exuberante cerro, de unas 70 hectáreas, para disfrutar de la naturaleza a pleno con toda la familia. Este lugar se encuentra abierto de 07:00 a 20:00.
El cerro cuenta con camineros y senderos para llegar hasta la cima y desde allí disfrutar de una vista extraordinaria, desde donde se puede ver el microcentro y la ruta PY01, ex-Acceso Sur.
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Cuenta además con un bosque, en donde se respira aire puro, una laguna que transmite paz y tranquilidad. También tiene espacio para el campamento y la práctica de todo tipo de deportes.
A este distrito se llega por la zona de San Lorenzo, Guarambaré y Asunción por la ruta PY01 Mcal. Francisco Solano López.
Villa Elisa
Esta localidad está ubicada a escasos 20 kilómetros de Asunción, al sur del departamento Central y al costado del río Paraguay. Cuenta con sitios para disfrutar de la naturaleza y el aire puro.
Uno de los lugares más visitados es el Paseo Parque, que cuenta con camineros y jardines para disfrutar de la fauna y la flora durante todo el día. Las mariposas y los pájaros engalanan la zona con sus colores y cantos.
Cuenta con estacionamiento y cercado para dar seguridad a los visitantes en todo momento. Se pueden realizar caminatas, trotes y otro tipo de ejercicios en el lugar. La entrada es libre y gratuita.
Areguá, la capital de Central
La localidad de Areguá, capital del departamento Central, es otra de las ciudades bendecidas por la naturaleza y que invita a disfrutar de sus bondades en estas vacaciones de invierno.
Los cerros Kõi y Chororî son verdaderos atractivos naturales, y se encuentran ubicados al noroeste del lago Ypacaraí. Se puede llegar por Capiatá, Itauguá y Luque.
Estas elevaciones forman parte del patrimonio natural desde 1993; son atractivos por sus peculiares formaciones de rocas areniscas hexagonales. El cerro Kõi tiene 12 hectáreas y el Chororî posee una extensión de 5 ha.
Este fenómeno geológico, que, según investigadores, es común en formaciones de piedra basáltica; sin embargo, con areniscas, se da apenas en algunos países como el Paraguay, Australia, Tasmania, Estados Unidos, Escocia, Antártida y Brasil.