Campesinos de Caazapá cumplirán un año acampando frente al Indert

El próximo 11 de agosto se cumplirá un año desde que un grupo de campesinos llegó desde Caazapá hasta la capital del país e instaló un campamento frente al Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert). Hasta hoy, no encuentran respuestas a sus reclamos.

Campesinos caazapeños acampan frente al Indert desde hace once meses.
Campesinos caazapeños acampan frente al Indert desde hace once meses.

Ante la falta de respuestas por parte de las autoridades nacionales, un grupo de campesinos caazapeños cumplirá un año acampando en Asunción, frente al edificio del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert).

En agosto se cumplirá un año de la llegada de un grupo de campesinos de Caazapá hasta el microcentro capitalino para solicitar se solucione el problema de la tierra.

En el 2014 ya se habían instalado por meses en el mismo sitio y en el 2015 mediante una resolución se les prometió la entrega de unas 700 hectáreas de tierra, sin embargo, solo 142 hectáreas fueron entregadas.

“Hicimos escuela, colegio, vivienda bajo tabla y electrificación. Alcanzó para media hectárea para algunos y lo restante, que no nos entregaron, están siendo utilizados por sojeros brasileños, que es lo que venimos a reclamar al Indert”, explicó el vocero Trífido Ayala.

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Aseguró que sus reclamos cuentan con la documentación necesaria y que fueron recibidos por las autoridades del Indert el año pasado, pero aún no tienen respuestas.

Indicó que no volverán a Caazapá si el Gobierno no les da una salida, una respuesta al problema de la tierra.

“Como caazapeños lamentamos esta situación. Advertimos al Gobierno que no vamos a salir de acá y si piensan en desalojarnos, esa no es la solución. Si no nos dan una salida vamos a venir todos acá, allá ya no tenemos nada que hacer sin tierra para producir”, manifestó.

Agregó que tampoco es una solución que todos lleguen hasta la capital, porque temen que los jóvenes accedan a las drogas.

Necesitamos un pedazo de tierra para volver a nuestro valle, para sembrar y producir”, enfatizó.

Denunció que el Indert le cerró las puertas para que no puedan ingresar a usar el baño, además de cortarle el suministro de agua y electricidad.

“Sobrevivimos gracias a la solidaridad de la ciudadanía asuncena y a los aportes solidarios que nos llegan desde Caazapá, de actividades que hacen para ayudarnos. Es inhumano como estamos, hacemos nuestras necesidades en un plástico y luego tiramos”, lamentó.

Son en total 17 hombres, jefes de hogar, con familias que los esperan en Caazapá.

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