Cargando...
Hace un año exactamente, el 6 de noviembre de 2017, se destapó la olla, y una muy sucia. Salían a luz los primeros audios en los que se oían cómo la clase política, en la persona del exsenador Óscar González Daher, negociaba con jueces y fiscales decisiones del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM). Todo esto a través de su secretario, Raúl Fernández Lippmann.
Escuche un compilado de los audios filtrados haciendo clic aquí
Este hecho marcó definitivamente la vida política de nuestro país, ya que se dieron varios cambios, muy drásticos, que se generaron luego de que creciera el repudio ciudadano ante los hechos de corrupción, sobre todo de tráfico de influencias, desvelado desde ese momento. Fueron muchos los que resultaron “salpicados” a raíz de esta situación, como ser el también exsenador Jorge Oviedo Matto (ambos parlamentarios renunciaron por la fuerte presión ciudadana).
Lea más: Fiscala Rojas “está muerta”
El 14 de diciembre radio ABC Cardinal difundió nuevos audios en los que González Daher plantea a una jueza un trato de favor a un antiguo intendente de Mariano Roque Alonso, Walberto Zárate, también oficialista, acusado de desfalco, entre otras conversaciones que demostraban cómo el sistema judicial del país era manipulado al interés del senador cartista, con la complicidad de magistrados y fiscales.
Lea más: “Se va a morir en la cárcel”
En los audios también aparecía cada vez más el abogado Carmelo Caballero, quien estaría involucrado en la rosca de tráfico de influencias para favorecer a sus clientes. Se escuchan al abogado y a Fernández Lippmann “negociar” varias causas, incluso la quema del Congreso, y señala que supuestamente José Ortíz, gerente de la tabacalera de Cartes, hasta ofrecía dinero por cada manifestante imputado por la citada causa.
Los audios salpicaron a varios como también al senador del Unace, Jorge Oviedo Matto, senador Adolfo Ferreiro, diputado Oscar Tuma, contralor Enrique García, abogados, ministros de la Corte, jueces y fiscales. Incluso se menciona al fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón.
Quedaron en evidencia además fiscales, jueces, y otros parlamentarios que utilizaban su influencia para “torcer” la justicia, incluso en la designación de ternas. Muchos fueron los afectados y, pese a que se dieron varios cambios, siguen los intentos por trabar los procesos judiciales correspondientes. La ciudadanía fue una pieza fundamental en todo este proceso, al expresar su indignación ante lo develado. Hasta estos días se sienten los cambios, con un creciente repudio ciudadano ante hechos corruptos.