Amenazas se tornan violentas

La familia de Liz Teresita Arzamendia, asesinada durante un asalto en junio del 2014, sigue siendo objeto de amenazas que cada vez se tornan más violentas. En esta oportunidad una sobrina de la víctima fue atacada por un desconocido en su apartamento.

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Camila Arzamendia, sobrina de Liz Teresita, sufrió un profundo corte en la cabeza luego de que fuera atacada en su propio apartamento situado en un edificio en el barrio Virgen del Huerto de Asunción.

La abogada de la Familia, Cecilia Pérez, relató a ABC Color que la joven llegó al edificio y cuando se disponía a ingresar a su apartamento fue violentamente empujada por un sujeto que tenía el rostro oculto tras un pasamontañas.

En un intento por salvaguardar su integridad, Camila le dice al desconocido que si lo que quiere es robar, puede llevarse todo lo que desee, al lo que el sujeto responde con un nuevo golpe y le dice “ahora me voy a buscarle a tu mamá”.

Acto seguido, el atacante toma del brazo a la joven y la arroja con violencia contra un mueble de cocina con superficie de mármol, que le produce un severo corte en la cabeza, según relata la abogada.

“Decile a tu mama que se deje de joder”, amenazó el desconocido y luego escapó del sitio. Según describió Camila, su atacante era de tez morena y lo notó bastante nervioso durante el amedrentamiento.

La denuncia fue realizada en la comisaría 9º Metropolitana y los datos ya fueron puestos a disposición de la fiscala que lleva adelante el caso de Liz Teresita

PROTECCIÓN POLICIAL

A raíz del amedrentamiento recibido en la víspera por parte del padre de Liz Teresita, don Del Rosario Arzamendia, la fiscalía dispuso protección policial para la residencia familiar, con el fin de evitar más ataques.

Sin embargo, las hostilidades no cesan y ahora se enfocan a los integrantes de la familia que viven en otros sectores, lo que demuestra el interés por frenar el proceso contra los cinco procesados por el caso, Bartolomé Franco Leguizamón, Alexander Wilson Patiño Franco, Alejandro Nicolás Martínez y Rodrigo Maciel Samudio.

Liz Teresita, funcionaria del Senasa, fue apuñalada el 17 de junio pasado, metros antes de llegar a su casa en el barrio Vista Alegre de Asunción, para solamente robarle un celular que luego fue puesto a la venta por la suma de 50 mil guaraníes.

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