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Sergio Dávalos, de 23 años de edad, trabaja para la Línea 36 desde hace solo diez meses y esta mañana tuvo lo que se podría catalogar como su peor día laboral al mando de un colectivo, al protagonizar un violento choque contra un árbol.
Una vez pasada la conmoción, Dávalos relató el complicado momento que le jugó un desperfecto mecánico. Comentó que se percató de que se quedó sin frenos y de que conducía sin manera alguna de poder detener la máquina. “Ahí bajando me pasó eso, le dije a los pasajeros y se fueron todo hacia atrás; tuve que reaccionar y me decidí”, expuso, según informó Gabriela González Escalada, periodista de ABC Color.
La velocidad que llevaba era de aproximadamente 60 kilómetros por hora y, sin frenos, el colectivo podía ocasionar un accidente con desenlace trágico, motivo por el cual tuvo que tomar una decisión. “Sabía que iban a lastimarse (los pasajeros), pero qué iba a hacer; es mejor que arriesgue nomás, no tenía otra opción y me decidí”, justificó su decisión, que terminó siendo acertada, pues los pasajeros solo sufrieron heridas leves luego de que Dávalos chocara de forma intencional contra un árbol en la intersección de Mcal. López y Saturio Ríos, para poner fin al descontrolado viaje.
El choque, registrado poco después de las 7:30, dejó como saldo 11 personas con contusiones leves, que fueron derivadas al Hospital del Trauma (ex Emergencias Médicas). No corrió la misma suerte el colectivo, que presenta importantes daños en la parte frontal.