“Tenemos muchas denuncias de invasiones, hasta de permisos otorgados por los mismos indígenas a las empresas para que ingresen a explotar sus tierras. Todos quieren sacarle provecho”, dijo hoy a la AFP Carmen Orlandini, asesora jurídica del Instituto Nacional del Indígena (Indi).
En enero pasado, el Indi reportó el avistamiento de hombres en estado silvícola en la región, en base a huellas de campamentos, instrumentos rústicos de caza y calzados abandonados por los silvícolas.
El fiscal del ambiente José Luis Casaccia investiga un caso de invasión e intento de apoderamiento de parte de las tierras de los ayoreo totobiegosode –unos 650 km al norte– que apuntan a dos compañías conocidas como Casado y San José.
Imputó a dos personas, el propietario de una topadora y al chofer, pillado in fraganti haciendo trabajos de apertura de caminos, construcción de tajamares y alambradas perimetrales.
“Recibimos la denuncia de la organización GAT (Grupo de Apoyo a los Totobiegosode). Imputé a los invasores por no contar con permiso. Hemos conseguido un resultado importante en un territorio muy vasto. El daño fue mínimo”, señaló Casaccia a la AFP.
El Indi presentó ante la fiscalía una denuncia contra las compañías Casado y San José por exhibir un supuesto permiso de los propios líderes totobiebosode, reportado como falsificado, para explotar parte de las tierras.
La asesora jurídica Orlandini dijo que las denuncias son muchas veces muy controvertidas y complejas. “Se tienta, se engaña a los líderes, estos niegan, a veces también quieren sacar ventaja y no se sabe exactamente si firman los permisos”.