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En los últimos 10 años el Estado paraguayo entregó a los partidos políticos, en concepto de subsidio, la suma de US$ 103.634.947, lo que al cambio actual nos da una cifra de G. 590.719.196.726.
Los partidos y movimientos políticos deben rendir cuenta ante el Tribunal Superior de Justicia Electoral presentando las facturas de los gastos de campaña que realizan, posteriormente, el mencionado organismo presenta los datos a la Contraloría General del Estado para el cruce de datos.
A pesar del control que señalan ejercer, luego de las últimas elecciones municipales llevadas a cabo en nuestro país, el pasado noviembre de 2015, los partidos políticos presentaron sus facturas con “extraños” gastos.
Por ejemplo, el partido de gobierno, la Asociación Nacional Republicana presentó la factura de un salón de belleza que facturó G. 1.045.750 por fotocopias y carpetas archivadoras.
El partido Liberal presentó una factura por G. 13.470.000, supuestamente de gastos de campaña, pero en la que figuran compras de varios medicamentos en una farmacia.
Gastos de supermercado, como huevos, queso paraguay, tomate y arveja también fueron presentados como gastos de campaña, esta vez por parte del partido Frente Guasu.
Boletos de avión por US$ 5.880 figuran entre las facturas de Juntos Podemos, mientras que el partido Demócrata Progresista gastó hasta 50 millones de guaraníes en rubros que no especificó. El partido del fallecido general Lino Oviedo (Unace) unificó todos sus gastos con el concepto “servicios prestados”.
Sin embargo el representante del TSJE, César Rossel, director de Partidos y Movimientos Políticos, asegura que cuando las facturas presentadas por las organizaciones políticas no corresponden a los denominados gastos de campaña, son devueltas y los responsables se exponen al pago de una multa establecida en las leyes.
“En el 2015 se aplicó una multa del 10 por ciento a todas las agrupaciones políticas que no cumplieron con el cien por ciento de las facturas; se pagó solo el noventa por ciento de lo que es subsidio electoral. De 335 agrupaciones políticas que compitieron en las elecciones municipales del 2015, solo 54 cobraron ese subsidio. Las demás, aparte de la penalidad, no cobraron”, explicó Rossel.