Héroe de Guerra de Chaco festejó un siglo de vida

CARAPEGUÁ. El excombatiente de la Guerra del Chaco Leoncio Medina Parra festejó el pasado lunes 13 un siglo de vida. En su comunidad, Cerrito, es reconocido por su destacado servicio en favor de su comunidad. Fue un activo dirigente colorado.

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El abuelo "León" festejó sus 100 años rodeado de sus cuatro hijos: Celso Ramón, Elba Justina, Silvia Esperanza y Aida Vicenta Medina Páez, además de 21 nietos y 15 bisnietos.

También recordó a sus hijos ya fallecidos: Felipe Neri, María Salustiana, Zoraida Ramona y Amalia.

La gran fiesta familiar se desarrolló en el salón municipal de esta ciudad.

Hasta el lugar llegó don Leoncio, acompañado de su esposa Dionisia Ignacia Páez (80 años), con quien tuvo 6 hijos. De pie y con fervorosos aplausos y al son de la música de la polca colorada "13 Tujuti" fue recibido por los presentes. “Bienvenido, abuelo, y gracias por los 36.500 días de vida de estar con nosotros”, rezaba un escrito exhibido en una de las paredes del salón.

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Sus hijos, nietos y bisnietos llegaron desde diferentes puntos del país y de la Argentina para compartir la gran fiesta social y la fiesta inolvidable de los 100 años de un héroe de la Guerra del Chaco que hasta ahora sigue batallando y es considerado por sus allegados y vecinos del barrio Santo Domingo de esta ciudad como reliquia de la comunidad.

En su casa nos recibió don Leoncio junto con su esposa doña Dionisia, a quien considera su compañera, su guía y su motivo de vida. “Gracias al cuidado de mi esposa sigo vivo y a ella le debo tanto. Hay que ser agradecido en la vida y por sobre todo cuando uno se equivoca debe rectificar rumbo por amor a la mujer y a la familia”, sostuvo.

Don Leoncio fue a los 18 años a la Guerra del Chaco, se alistó en Carapeguá y desde Paraguarí fue a tren hasta Asunción. De ahí viajaron en barco hasta Concepción y luego al campamento en el Chaco. Dijo que, como tenía conocimiento de manejo de rodeo, se quedó en el campamento para llevar el ganado al faenamiento y que posteriormente era distribuido a los diferentes destacamentos para alimentos de los soldados.

Como anécdota recuerda que un poblador de Paraguarí, desde que se subió al barco hasta llegar al Chaco, iba llorando y él lo animaba diciéndole que el hombre paraguayo debe ser fuerte y orgulloso.

Al retornar de la Guerra se casó con doña Estanisla Silva, quien falleció durante un proceso de parto. Con ella tuvo dos hijas: Zoraida Ramona y Amalia, ambas también ya fallecidas.

Posteriormente, conoció a la que ahora él considera su “guía”: doña Dionisia Ignacia, con quien llevan 64 años de casados. Dijo que Dios le retribuyó bien al darle como esposa a una espléndida mujer, quien a los 16 años se había casado con él y bajo su regla de respeto y fidelidad formaron su hogar y siguen unidos, siendo el ejemplo para sus hijos y todos sus descendientes.

Dijo que el diálogo con la pareja para saldar diferencias, hablar de lo que digusta a cada uno sin agresión verbal ni física y sin que los hijos escuchen, el respeto entre ambos y el crecer juntos como pareja con amor y responsabilidad son actitudes que hacen que un matrimonio perdure.

Al consultársele si es cierto que después de casarse era "travieso" con las mujeres, aseguró que el ser mujeriego le trajo varias veces complicaciones en el hogar, pero que gracias a su esposa Dionisia pudo rectificar rumbo y comprendió que cuando uno asume un compromiso de tener a su lado a una mujer y con hijos debe ser bien hombre para mantener el hogar y mostrar buenos ejemplos de vida.

Resaltó que, pese a la dificultad que tiene para ver y los problemas de artrosis que lo aquejan ya por la edad, él se siente protegido y amado, y asegura que llegó a los 100 años gracias a la alimentación saludable que recibió en su niñez.

Dijo que siempre escucha que de la alimentación depende la salud que tengamos y asegura que en su niñez consumía leche de coco, maní con coco y leche, locro, poroto, jopara, albóndiga, mandioca con leche y casi no consumía fideo ni galleta. “Hoy día, la alimentación es diferente y hay mucha enfermedad”, señaló.

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