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Frente a la parada central de la Línea 49, empresa “La Limpeña”, hasta ayer se encontraban crucificadas 14 personas en total, de las cuales 12 son choferes y dos son esposas de estos, las cuatro últimas desde el sábado. Los choferes fueron despedidos hace poco más de 22 días al conformar un sindicato, informó el periodista de ABC Color Víctor Ruiz.
Un total de 10 conductores crucificados y Juan Villalba, titular de la Federación de Obreros de Transporte, fueron imputados por la representante del Ministerio Público, fiscala Sandra Fariña, por perturbación de la paz pública. Los mismos deberán prestar declaración indagatoria en la fecha. Al respecto, el sindicalista Julio Chaparro dijo a ABC Color que sus compañeros trabajan sin ningún tipo de problema causado por ellos. “Acá nadie le está faltando al respeto y hacen eso por nosotros”, dijo. Así también, manifestó que tres conductores más se unieron a la medida de fuerza cosiéndose la boca con clavos.
Manifestó que en esta situación hay mucho en juego: “Hay presión política, hay dinero malhabido de por medio y quieren tapar el sol con un dedo”. Amenazó, además, con que irán hasta al aeropuerto el día que llega el papa Francisco para mostrar la realidad porque los empresarios “quieren aparentar algo que no es”, haciendo referencia a las mejoras en la sede tras haberse iniciado los reclamos. “Acá hay gente con mucho sufrimiento ya, con mucho dolor, que no tiene ya qué comer en su casa” declaró. Agregó que muchos de sus compañeros son vistos por sus hijos, quienes les suplican que se levanten, lo que causa más dolor a los que están llevando a cabo este reclamo.
El ministro del Trabajo, Guillermo Sosa, manifestó ayer que es su deber precautelar los derechos de los trabajadores. Sin embargo, aclaró que tiene limitaciones constitucionales y legales. Por eso, exhortó a Juan Villalba, presidente de la Federación de Obreros del Transporte, y a los choferes de la Línea 49, levantar la medida de fuerza para la apertura una mesa de diálogo con la patronal.
Sosa dijo que el sindicato formado por los choferes no está reconocido por el Ministerio, por lo que los miembros de la comisión directiva del gremio no tienen fuero. Manifestó que la línea está legalmente habilitada para despedir a los obreros, salvo a los que tienen estabilidad laboral (diez años en la empresa).
Villalba y los choferes dijeron que la Línea 49, cuyo dueño es el diputado liberal Celso Maldonado, no puede realizar despidos porque el Código Laboral ampara a los trabajadores que desean formar un sindicato. Sobre la crucifixión de los choferes, el ministro Sosa dijo que es una medida drástica realizada sin siquiera intentar un diálogo con la patronal con mediación del Ministerio. Villalba dijo al respecto que, diez choferes de la comisión directiva del gremio, formado en asamblea del 20 de junio, fueron despedidos.
La empresa tampoco deja trabajar a unos 50 obreros, dijeron, pero Maldonado rechaza esta acusación. El diputado dijo que la indemnización para los despedidos está en una escribanía. Intentamos hablar ayer con el sindicalista, pero no contestó su celular. El ministro informó que la Línea 49 es una de las empresas del sector que trabajan formalmente. Aseguró que 120 choferes tienen seguro del Instituto de Previsión Social. Los abogados del Ministerio dijeron que los sindicalistas debieron pedir a un juez un amparo constitucional alegando que fueron despedidos por haber fundado un sindicato.