Madre de alumna que escrachó a gobernador: “Jamás pensó que la suspenderían”

Lilian Bóbeda, madre de la estudiante que escrachó al gobernador de Presidente Hayes, Rubén Rousillón, en un acto público, habló sobre la sanción que le impusieron a su hija, de quien dijo sentirse orgullosa ante su valentía.

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“Mi hija me dijo que mientras mencionaban a Rousillón como flamante gobernador, sentía un dolor”, relató la madre de Antonella, la niña que días atrás escrachó al nuevo gobernador del departamento de Presidente Hayes, Rubén Rousillón, por sus antecedentes judiciales.

“Cansada de lo que escuchaba, decidió retirarse y se acercó, se paró frente a él y le dijo: ‘Señor, usted no es digno. Tiene que estar en la cárcel. Está imputado. Me duele muchísimo que en sus manos esté nuestro departamento’. No puedo creer que ella haya tenido el coraje y la valentía, que muchos queremos decir y no lo hacemos”, señaló en diálogo con ABC Cardinal.

Relató que luego de eso vino la suspensión por parte del colegio. “Jamás mi hija pensó que la iban a suspender”, dijo. Lo que ocurrió es que llamaron a la madre y le pidieron que no asista a clases mientras se decidiera qué sanción le aplicarían por haber agredido al gobernador “con el uniforme de la institución”, sostuvo.

Esto se extendió por tres días sin respuestas por parte del director, por lo que la madre acudió a las autoridades del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) para pedir la reposición inmediata de su hija.

Relató que desde ese día su hija recibe muchas demostraciones de cariño por las calles, cuando los pobladores de Villa Hayes la felicitan. Otro hecho que se dio luego del loable gesto de la joven fue que sus compañeros de aula tampoco asistieron a clase, en solidaridad con Antonella.

Por su parte, Sonia Escauriza, directora de Niñez de la MEC, confirmó a ABC Color que ya intervinieron en el caso y solicitaron un informe al director de la institución, quien argumentó que se trata de una institución privada y debían ir los funcionarios a corroborar la situación.

En este sentido, el asesor departamental y la supervisora de la zona llegaron a la institución ayer a fin de corroborar el caso, pero no accedieron a ninguna prueba documental, ya que la suspensión no está establecida en las normas de convivencia. El director, entonces, argumentó que no  existió la suspensión, pese a que existió la ausencia y la nota remitida por la madre. “Hay una sanción tácita porque no le permitió asistir a clase, pero sí emitió un acta. La gente de la supervisión ya está trabajando para que estos niños recuperen esos tres días. Lo que dijimos es que se vulneraron los derechos de la niña al no permitirle ejercer su derecho a la libre expresión”, sostuvo en diálogo con ABC Color.

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