Actualmente, Paraguay cuenta con aproximadamente 210.000 hectáreas plantadas de especies forestales. Sin embargo, el 80% son de baja calidad y se destinan a biomasa; solo el 20% se canaliza hacia madera industrial de mejor calidad. Con proyectos en marcha y una creciente demanda tanto local como internacional, las inversiones en este sector son cruciales para asegurar un futuro sostenible.
Proyectos destacados en el sector
Uno de los proyectos más ambiciosos es la fábrica de celulosa de Paracel, que requerirá unas 150.000 hectáreas de plantaciones para su operación inicial. Si la demanda aumenta por temas de producción, podrían necesitarse 250.000 hectáreas en rotación permanente.
Por otro lado, el proyecto Silvipar, que planea una segunda planta de celulosa en el sur de Paraguay, contará con 200.000 hectáreas de plantaciones en un radio de 100 kilómetros alrededor de la industria. Este proyecto tendrá un impacto positivo en la generación de empleos y la economía local.
Comparación de ingresos
Según estudios de Raúl Gauto, el sector forestal podría generar más ingresos que la industria hidroeléctrica, la soja y la carne en el futuro. Esto se debe a la creciente demanda mundial de productos forestales y a la capacidad de Paraguay para producir madera de alta calidad.
El experto señala que invertir en plantaciones forestales puede generar un retorno de 2,5 veces la inversión inicial en un período de 10 años, lo que equivale a una ganancia aproximada de US$ 1.000 por hectárea al año (en sistemas silvopastoriles).
Generación de empleo
En cuanto a la generación de empleos, Gauto estima que por cada 15 hectáreas de plantaciones forestales se crea un puesto de trabajo. Es decir, si se plantan 150.000 hectáreas al año, esto podría traducirse en 15.000 a 20.000 empleos anuales.
“La creación de empleo en el sector forestal no solo mejora la economía local, sino que también contribuye a la dignificación del trabajo, con salarios mínimos y beneficios laborales, ya que las empresas deben contar con certificaciones internacionales para poder exportar”, explica Gauto.
Inventario urgente
El consumo de madera para biomasa por parte de industrias como plantas azucareras, alcoholeras, silos, yerbateras, curtiembres y frigoríficos es alto y sigue siendo más económico que otras fuentes de energía.
Gauto advierte que, cuando la primera planta de celulosa comience a operar, la demanda de material para calderas aumentará significativamente. Además, laminadoras, contrachapadoras y fábricas de madera terciada requieren materia prima de alta calidad, pero en el mercado aún escasea este tipo de madera, lo que representa una oportunidad para cubrir esa necesidad.
El mundo necesita madera
La demanda de productos forestales está en aumento, impulsada por el crecimiento poblacional y la popularidad de derivados de la celulosa, que tienen más de 200 aplicaciones industriales.
Para Gauto, Paraguay tiene potencial para superar a Chile e incluso a Uruguay en producción forestal. En la Región Oriental existen 16 millones de hectáreas aprovechables, de las cuales 8 millones son pasturas.
De estas, podrían plantarse 2 millones de hectáreas con sistemas silvopastoriles o plantación directa. “Con eso ya superaríamos las 1 millón de hectáreas plantadas que tiene Uruguay, donde operan 3 plantas de celulosa”, concluye Gauto.