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Tras las revelaciones sobre su mansión en San Ber, los “sobres” en Mburuvicha Róga y otros casos, “Pinocho” buscó refugio espiritual con un pastor evangélico que tiene un nombre muy sugerente: Cash.
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Seguramente recibió duras críticas del entorno del “Patrão” y con urgencia tuvo que organizar una celebración religiosa católica en la Capilla “Niño Jesús de Praga” de Mburuvicha Róga, con presencia del Nuncio Apostólico nada más y nada menos.
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La conducta política oculta de “Pinocho” asusta mientras el país se está yendo a la deriva. Los hospitales se están quedando sin médicos y sin insumos, mientras los grupos criminales se mueven como quieren por el país. Hasta el aeropuerto internacional hacía aguas por todos lados y Peña, feliz siendo un “SaltimBanki”.
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Este gobierno cartista está empeñado en lanzar humo con cosas “históricas”. Su ministra de Salud, María Teresa Barán, firmó un convenio el 1 de julio pasado con un instituto médico de Corrientes, tremendamente llamativo.
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Los paraguayos pueden ir a dicho instituto argentino para que puedan ser atendidos gratuitamente. Pero previa autorización del Ministerio de Salud. Una locura.
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La excusa gua’u es que en nuestro país no hay especialistas. Sin embargo, desde la Sociedad Paraguaya de Cardiología le desmintieron a este Gobierno y con argumentos bien sólidos.
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Y la pregunta es: ¿Por qué los que prometieron que “Vamos a estar mejor” no invierten en la salud del país? ¿Ahora tenemos que “exportar” pacientes porque acá no hay condiciones? ¡Una verdadera vergüenza!
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A la pareja “petrolovers” poco o nada le importa cómo anda el país. Ellos siguen de luna de miel.
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Pasó un año y ahora recién Petropar admite que el precio que se ofreció por el gasoíl catarí era irreal.
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Esperemos que Emily sea suficientemente valiente para investigar también a la misteriosa empresa ligada a Alejandro Domínguez, hijo del titular de la Conmebol. Hasta rige la Constitución stronista: Para los amigos todo y para los enemigos, palo.