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Las periodistas Marta Escurra y Magdalena Benítez vivieron un momento de shock esta mañana. Las mismas habían terminado su programa radial televisivo “Entre Gallos y Medianoche” y se disponían a volver a sus casas en un vehículo.
Escurra detalló que, por el horario en el que salen del trabajo los domingos, están acostumbradas a ver todo tipo de escenas en las calles asuncenas; también cosas comunes como grupos de jóvenes deambulando bajo los efectos del alcohol.
Sobre la calle Paraguayo Independiente, en inmediaciones de la Comandancia Nacional y del Congreso Nacional las mujeres divisaron a un grupo de 20 a 30 personas que agarraba toda la calle y obstaculizaba el tránsito.
Las mismas estaban viajando con las ventanillas abiertas, pero al percatarse de lo que ocurría enfrente levantaron el vidrio. Asimismo, disminuyeron la velocidad del auto. A unos 50 metros pasando la Comandancia, el vehículo se acercó al grupo de personas e intentó desviar; sin embargo, algunos se acercaron al auto, comenzaron a golpear e intentar abrir la puerta.
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Uno de ellos logró abrir la puerta del lado conductor y exigió con prepotencia que entreguen sus celulares. “Me quedé en shock, no entendía qué es lo que estaba pasando porque fue algo totalmente inesperado”, expresó Marta Escurra.
Señaló que no logró ver si la persona tenía algún tipo de arma. Marta detalló que logró reaccionar y aceleró el vehículo. “En la huida se escucharon golpes”, relató.
Manifestó que sobre las calles Paraguayo Independiente y 15 de Agosto había tres agentes uniformados cubriendo el acceso al Palacio de López a quienes les contaron el momento de terror que vivieron.
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Los uniformados expresaron que vieron lo que ocurrió. “No nos preguntaron si estamos bien, si necesitábamos ayuda. Solo nos dijeron que son de la Chacarita”, resaltó.
Esa situación generó impotencia a los periodistas. “Solo nos quedó regresar a nuestras casas en estado de shock, impotencia e indignación porque en este país solo la pasan mal quienes trabajan”, lamentó Escurra.