El fiscal Óscar Fernández, quien investiga el supuesto secuestro de una avioneta en la estancia Ibel Paraguaya, cuyo predio abarca los municipios de Nueva Esperanza y Katueté, Canindeyú, realizó un registro audiovisual de la apertura de la caja fuerte que se encontró dentro de la aeronave.
La apertura se realizó con presencia policial y con la inspección de canes antibombas. Tras deslacrar la caja fuerte, siendo que la misma estaba envuelta de un material parecido al papel film. Al abrir, registraron que la caja estaba vacía.
El aterrizaje forzoso de la avioneta que transportaba una caja fuerte de gran tamaño, sospechosa de contener elementos ilícitos, se registró el domingo. Los dos pilotos declararon que fueron secuestrados y como sospechoso fue aprehendido Newton Sergio Dias Donni (77), de nacionalidad brasileña.
La aeronave aterrizó en Caazapá y cuando el detenido, junto al prófugo, esperaban a otro cómplice que debía ayudarles con la recarga de combustible para seguir camino a Bolivia, llegó la Policía que rescató a los dos pilotos y capturó a Dias Donni.
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Secuestro de avioneta en Katueté
Los presuntos secuestradores se encontraban armados y que el aprehendido manifestó que el hombre que logró escaparse era muy violento y que temían por su vida.
La caja fuerte que era transportada en la avioneta es de gran tamaño, pesa unos 250 kilos. Para el traslado hasta la patrullera trabajaron seis hombres.
La avioneta, Cessna 208 Caravan 675, con matrícula ZP-GLT, está registrada a nombre de la empresa Los Trigales SA, sale del Aeropuerto Silvio Pettirossi, Luque. Su destino era la estancia Ibel Paraguaya, cuyo predio abarca los municipios de Nueva Esperanza y Katueté, en el departamento de Canindeyú, donde aterrizó a las 09:43.
Al aterrizar, la tripulación fue encañonada y los secuestradores solicitaron ser llevados hasta Bolivia. Llevaban volando unos 30 minutos cuando el piloto comunica a los presuntos secuestradores que no llegarían hasta Bolivia con el combustible que tenían.
Los pilotos proporcionaron opciones de lugares para reabastecerse de combustible y eligieron Loma Plata, pero luego, cambiaron de planes y fueron hacia Caazapá. Al ser alertados de que faltaba combustible, los presuntos secuestradores se comunicaron con un contacto.
Mientras aguardaban se internaron en una zona boscosa, pero fueron vistos por la patrulla que acudió al auxilio luego de los llamados de alerta de los pobladores.