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Peña cerró su última gira, que previamente tuvo escala en Panamá, sin actividades oficiales, ya que desde presidencia se limitaron a recompartir su discurso (dado el viernes pasado) ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Ginebra, donde nuevamente intentó posicionar a Paraguay como una país “atractivo” para la inversión extranjera.
En tal sentido, tuvo un mensaje contradictorio respecto a su discurso interno y también respecto a la realidad de su gestión.
“Mi país también entiende la importancia de la Estabilidad y resiliencia frente a la incertidumbre. En las últimas dos décadas, mientras que gran parte de nuestra región ha experimentado una volatilidad significativa, crissi económicas y coquete con el populismo, Paraguay eligió un camino distinto”, dijo Peña.
La primera contradicción refiere a que las últimas dos décadas que menciona, incluye al gobierno anterior de su correligionario Mario Abdo Benítez, al cual en nuestro país critica cada vez que tiene chance como parte del discurso del cartismo.
Por otra parte, en su intento de promoción del país ante empresarios internacionales sostuvo que las políticas económicas del país se sustentan en tres aspectos claves.
En tal sentido dijo que “transformación silenciosa y significativa” que llevó adelante país “se construyó en base a tres pilares: Estabilidad macroeconómica, fortaleza institucional y sostenibilidad ambiental”.
Precisamente la fortaleza institucional y la seguridad jurídica son dos aspectos que más se cuestionan al cartismo, que ha copado las instituciones y que intenta avanzar con medidas autoritarias, entre ellas, el intento de acallar a la prensa crítica, partidos opositores y organizaciones no gubernamentales no afines.
Paradójicamente hoy, día de la democracia en Paraguay, se espera el retorno de Peña, que había partido apenas el día después que estalló el escándalo de su nueva mansión en San Ber, no sin antes amenazar a ABC por las publicaciones y alegar que las mismas respondían a una “ataque político”, pero sustancialmente, sin explicar el origen de su repentina fortuna materializada en dicha mansión.
