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Un grupo de funcionarios del Hospital General de Lambaré, cansados del mal manejo en el lugar, denunciaron ante ABC Color la inacción por parte del Ministerio de Salud en dicho lugar que estaría manejado por el diputado renunciante cartista Orlando Arévalo y la concejal de dicha ciudad Carolina González.
Dieron nombres y facilitaron materiales audiovisuales donde se observan a funcionarios del nosocomio en actividades políticas entregando medicamentos, que serían suministrados por la cartera sanitaria pero que debían ser entregados a los pacientes.
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HURREROS CON CARGOS ESTRATÉGICOS
En el caso de directora del Hospital General de Lambaré, Griselda Isabel Meza, es una activa operadora y hurrera de la concejal lambareña Carolina González, quien no deja de alardear encuentros en la mansión de la edil y actividades políticas en barrios humildes y plazas, mientras pacientes cuestionan la falta de doctores, espacios limpios y medicamentos.
Otra que forma parte del equipo político de Orlando Arévalo, ubicada como jefa del Departamento de Enfermería, es Mirian Meza.
La mujer no pierde el tiempo para apoyar a su “líder”, también participa de las actividades políticas.
Otro que ya está mejor gracias la familia Arévalo-González es Rodrigo Mateo Recalde Vázquez, quien fue acomodado como jefe de Recursos Humanos del hospital. Él visita la mansión de la familia de políticos y comparte en redes sociales para mostrar su apoyo y seguir en el cargo.
Marcos David Carreras Aldama es otro funcionario de dicho puesto sanitario que forma parte del equipo político de Orlando Arévalo. También se le observa en las actividades políticas a la jefa de Promoción de Salud, Mariela Martínez.
Otro de los cercanos a Orlando Arévalo con un buen cargo es Gerardo Estanislao González Vera, quien cataloga como un “líder” al diputado cartista. El mismo se desempeña como jefe de Suministro del hospital.
