El gobernador del departamento de Cordillera, Denis Lichi, protagonizó una polémica este viernes tras dar un discurso durante un acto de entrega de aportes del Gobierno a escuelas.
Sus expresiones fueron interpretadas como una defensa del uso de la violencia física entre niños como método para enfrentar el acoso escolar, conocido como bullying.
“Muchos me dijeron que no diga así, pero tengo que decir que ahora se habla mucho del bullying. Nosotros antes el bullying se acababa con ‘soco’ (pelea) y después se respetaban entre los demás”, expresó Lichi frente a otras autoridades, directivos y estudiantes.
Además, afirmó en guaraní que en su época los problemas se resolvían a golpes y que, tras eso, los niños se hacían amigos. “Ahora nos dicen que no retemos. Antes, a nosotros nos retaban y en ‘soco’ solucionaban. Después de eso se volvían socios. El niño tiene que quemar etapas”, dijo.
La intención: alejar a los niños del celular y fomentar el juego
En otra parte de su discurso, Lichi también manifestó su preocupación por el uso excesivo del celular en la infancia. “Queremos alejarles de los vicios, queremos alejarles del teléfono celular. Queremos que jueguen y sean caraduras. El niño tiene que quemar etapas”, repitió.
Si bien la intención del gobernador parecía apuntar a promover hábitos más saludables, la forma en que lo expresó fue considerada inapropiada por muchos, especialmente en un contexto escolar.
Por otro lado, varias organizaciones anteriormente demostraron preocupación por el aumento de violencia y bullying entre los jóvenes, además del excesivo uso de las redes sociales para incitar la violencia.