“La vaca se come a bifes”, dijo ayer la líder de bancada de Honor Colorado, Rocío Abed, adelantando que irían paso a paso avanzando con el pedido de intervención, sobre todo contra el opositor Miguel Prieto y, de paso, contra su correlí, Óscar “Nenecho” Rodríguez. Hoy, la aplanadora cartista, en el tiempo que se cocina vuelta y vuelta un bife (15 minutos), dio trámite expeditivo a la integración de las respectivas, comisiones especiales de intervención.
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Según impuso la mayoría cartista en una expeditiva sesión -e inusual como destacó la diputada Rocío Vallejo (Partido Patria Querida)- se dispuso que en 24 horas, es decir, para la mesa directiva de mañana a las 9:00, que los líderes de bancada deben llevar sus propuestas de miembros.
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El cartismo tendrá mayoría propia en ambas comisiones, ya que de los 9 miembros corresponden 5 lugares al Partido Colorado, 3 al PLRA y 1 a la multibancada opositora.
Piden velas por la “muerte de la democracia”
“Hay que traer velas, porque le están matando a la democracia”, dijo el diputado esteño Miguel Martínez (Independiente), quien fue uno de los pocos a los que se permitió hacer uso de palabra ya que, en esta etapa, aunque en el debate previo se opusieron a tratar a las atropelladas este tema, los diputados Raúl Benítez (Independiente) y Vallejo. Martínez consideró el atropello como una estocada más del cartismo a la democracia.
“Esto es el comienzo de una dictadura que hace rato están planificando los cartistas. Para nosotros, como opositores, es un día negro porque acá se está quebrando el Estado democrático y el Estado de derecho", señaló Martínez.
El diputado Rubén Rubín (Independiente), si bien repudió el apuro, sobre todo porque el cartismo tiene suficiente mayoría para hacer las cosas como corresponden, también se desmarcó de Prieto, diciendo que si hizo mal las cosas, no aplicaría la ley del “chancho de mi chiquero”.
“Quiero saber cuantos nepos tiene Miguel (Prieto), cuantos tiene Nenecho, yo no voy a jugar el chancho de mi chiqueros, estamos como estamos porque los colorados, liberales y opositores hacen los mismo”, dijo Rubin, insistiendo en que la corrupción “es una práctica nefasta que no tiene color”.
Poco tiempo hubo para el debate, ya que el diputado cartista Yamil Esgaib pidió cerrar el debate y llevar a votación. Lo cual con la misma avasallante mayoría cartista se aprobó.