Con el respaldo de la bancada oficialista, Javier Zacarías Irún fue confirmado para presidir la comisión hasta el 30 de junio de 2027, acompañado por Lilian Samaniego como vicepresidenta y Carlos Núñez Agüero como relator. Esta conformación provocó duras críticas por parte de referentes opositores, quienes denunciaron una imposición autoritaria por parte del Partido Colorado, al que calificaron como la “aplanadora del bien”.
El senador Eduardo Nakayama (independiente) consideró un contrasentido que, justamente en la Comisión de Asuntos Constitucionales —que debería ser la instancia de mayor equilibrio—, no se respete la pluralidad de la representación parlamentaria en la mesa directiva.
Señaló que el copamiento colorado “no respeta el pluralismo que exige la Constitución Nacional, ni tampoco la proporcionalidad en la integración de las comisiones”.
Lea más: Senadora cuestiona copamiento cartista y dice que ni “cargo de cuarta” ceden
Nakayama afirmó que una cosa es tener mayoría y otra muy distinta ejercer mayoritarismo, y advirtió que “no todo lo que se aprueba con votos es automáticamente legítimo ni constitucional”.
“Cuando uno tiene 23 votos cree que puede hacer todo lo que quiere: puede expulsar a una senadora, aunque no tenga la cantidad de votos para hacerlo, según nuestro reglamento interno, o puede incluso violar la propia Constitución”, declaró. “Me veo obligado a dejar constancia de mi desacuerdo con lo que considero una violación al sistema democrático, representativo y pluralista”.
“La aplanadora del bien toma posesión en Constitucionales”
La senadora Yolanda Paredes fue aún más crítica, y afirmó que sus colegas oficialistas “siguen lo que dice Santiago Peña, porque la aplanadora del bien es la que está tomando posesión de la Comisión de Asuntos Constitucionales”.
También acusó al oficialismo de haber “cocinado” la conformación de la mesa directiva a puertas cerradas:
“Lo que vemos aquí es un show. Ya se habló, ya se decidió entre cuatro paredes. Hoy solo vienen a legitimar una decisión previamente tomada. Esto es una tomadura de pelo a la ciudadanía”, dijo.
Paredes también rechazó la idea de negociar cargos en privado: “No estoy de acuerdo con que haya que ir a la oficina de (Natalicio) Chase a negociar cómo se conforma una mesa directiva, dijo al señalar que están en el Congreso, donde debe primar el respeto a las minorías y a la Constitución”.