El presidente de la Essap, Luis Fernando Bernal, se mostró contento luego de ocho meses de trabajo para reactivar el acueducto del Chaco. Remarcó que para ello tuvieron que ajustar la presión para evitar que las cañerías, que no son del material más adecuado, sigan sufriendo roturas. “Pudimos revivir a este muerto sistema en desuso”, sostuvo Bernal.
La Contraloría se encuentra realizando una fiscalización especial inmediata al fracasado acueducto del Chaco desde enero, pero el informe recién culminará en noviembre. La ministra del MOPC dijo ayer que denunciará a los responsables de la fracasada obra, pero a la vez intentó minimizar el tramo conflictivo que afecta a las cañerías que compró el exministro Ramón Jiménez Gaona.
El acueducto del Chaco tardó 10 años en construir la infraestructura, costó más de US$ 100 millones, pero sigue sin funcionar. “Le estamos dando sentido de urgencia para encontrar soluciones. El acueducto nunca funcionó. Siempre operó mediante soluciones transitorias. Hoy nuestra gente necesita agua entonces vamos a generar una intervención transitoria”, expresó la ing. Claudia Centurión, ministra del MOPC.
El acueducto del Chaco no funciona desde hace 8 meses. La obra, que costó más de 130 millones de dólares, no funciona por problemas técnicos y deberá llamarse a una nueva licitación para su reparación.
FILADELFIA. El proyecto “Agua para el Chaco”, más conocido como acueducto, a pesar de los bombeos exitosos de los últimos meses aún no provee de agua de manera regular a las comunidades nativas que serán las primeras beneficiarias. El panorama se torna preocupante, ya que a la llegada del invierno se suma la falta de lluvia en la Región Occidental.
LOMA PLATA, Chaco (Marvin Duerksen, corresponsal). La segunda fase del acueducto, que se inició a fines de julio de 2017, tiene actualmente concluidos 111 de 170 kilómetros (65%) de caños bajo tierra, según la Gerencia de Proyectos de Agua y Saneamiento del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).