15 de abril de 2025
El proyecto de la autopista elevada de Luque, como parte de la ampliación de las rutas Luque-Areguá y Luque-San Bernardino hasta la ruta PY02, afectará a propiedades privadas, lo que requerirá una millonaria inversión para las expropiaciones. La construcción comenzará a finales de 2025 y los trabajos durarán tres años, aunque el proyecto final aún no ha sido aprobado.
El ingeniero y actual concejal de Asunción, Pablo Callizo, explicó que esta autopista elevada servirá solo para beneficiar a un senador colorado y no para solucionar el problema del transporte. Indicó que con lo que se va a gastar en el megaviaducto se podría optar por otras alternativas que realmente sean beneficiosas. “Este tipo de obras no soluciona”, remarcó.
El concejal Pablo Callizo cuestionó el. proyecto de acceso y salida rápida con autopista elevada y nuevos corredores viales a Gran Asunción. El mismo lamentó que en lugar de invertir en vialidad, no se apueste por una reestructuración del transporte público.
La Organización de Pasajeros del Área Metropolitana de Asunción (Opama) expresó su repudio al proyecto que pretende construir una “superautopista”, para entrada y salida a la Capital. Advierten que una nueva carretera no resolverá el problema de la movilidad de los ciudadanos, que realmente necesitan un cambio total en el sistema de transporte público, para una mejoría de la calidad del servicio.
El proyecto para mejorar las rutas Luque-Areguá y Luque-San Bernardino hasta su conexión con la ruta PY02 tiene el objetivo de descomprimir el alto tránsito de la zona, así como el ingreso y la salida de los vehículos de la capital del país, aproximadamente 1.300.000 personas.
El MOPC presentó el proyecto de acceso y salida rápida con autopista elevada y nuevos corredores viales a Gran Asunción. El mismo busca agilizar el tránsito desde ciudades aledañas y otros puntos del departamento Central.