21 de agosto de 2025
Paraguay también enfrenta importantes limitaciones en sus capacidades de gestión pública, lo que incide en la eficiencia y efectividad de sus políticas. Conforme con datos recabados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y que pudieron sufrir leves variaciones sin representar cambios significativos, en el pilar de instituciones del último Informe de Competitividad Global del Foro Económico Mundial ocupaba el puesto 115 entre 141 economías.
Aunque Paraguay ha avanzado en el acceso a cuentas bancarias, la inclusión financiera aún enfrenta desafíos importantes, principalmente en términos del “uso” efectivo de los servicios financieros y la educación que permita aprovecharlos, señaló el economista Jorge Garicoche. Dijo que apostar por estos dos pilares será crucial para avanzar en el proceso de formalización.
Pese a la incertidumbre y los desafíos económicos actuales, el país y la región están atravesando un “punto de clave o de inflexión” para avanzar en el proceso de inclusión financiera, un pilar fundamental para el desarrollo, según destacó el experto de BID Invest, Terence Gallagher. Resaltó el potencial de herramientas como la inteligencia artificial, los pagos electrónicos y más para transformar el panorama financiero.
El mayor acreedor del país entre los organismos financieros internacionales es el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según el informe de deuda pública al mes de abril del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Además, el gobierno gestiona la aprobación de otros cuatro nuevos préstamos de la entidad.
Mientras el MOPC prolonga la evaluación de ofertas para las primeras obras cloacales de la cuenca Lambaré —tras eliminar a varios oferentes y habilitar solo dos propuestas con precios aparentemente sobrefacturados—, el Estado ya paga intereses por el préstamo. No obstante, la cartera se niega a revelar el monto del desembolso, alegando “confidencialidad”, a pesar de que esa información no forma parte del proceso licitatorio.
El envejecimiento poblacional suele abordarse como una carga para los sistemas públicos, en particular por el aumento sostenido de la demanda en tres frentes: pensiones, salud y atención a la dependencia. Sin embargo, el cambio demográfico también abre una ventana de oportunidades económicas que, si son gestionadas con anticipación y visión estratégica, pueden convertirse en motor de crecimiento. Este conjunto de dinámicas y sectores vinculados a las necesidades, capacidades y aportes de los adultos mayores conforma lo que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) denomina “Economía Plateada”.