29 de septiembre de 2025
La primera reunión interinstitucional con miras a la festividad mariana 2025 se llevará a cabo mañana a las 09:00 en el salón de eventos municipal de Caacupé, con participación de autoridades civiles, policiales y eclesiásticas.
Monseñor Celestino Ocampo, obispo de la Diócesis de Carapeguá, recordó que el verdadero seguimiento de Cristo implica autenticidad, compromiso y la disposición de cargar con la cruz. “Jesús no nos dice: síganme y todo estará mejor. Él habló siempre con claridad de las renuncias y cruces que hay que cargar”, remarcó. Fue durante la misa central en el Santuario de la Virgen de los Milagros de Caacupé.
El presbítero César Nery Villagra criticó a quienes buscan siempre ocupar los primeros lugares para gozar de privilegios y cortesía. Señaló que muchos aparentan humildad mientras ascienden, pero luego la abandonan, olvidando que los valores de la fe no se pueden fingir ni usar como escalera al poder. Fue en la misa central en el santuario de Caacupé.
El obispo de Benjamín Aceval, monseñor Amancio Benítez, presidió la misa central celebrada en guaraní, en el santuario de Caacupé. En su homilía afirmó: “Ñane retãme ñaikotevẽ salvación rehe” (en nuestro país necesitamos la salvación) y advirtió que esta no debe confundirse con discursos o promesas vacías, sino estar cimentada en la fe verdadera. También cuestionó a las autoridades por la situación de la salud pública y la falta de atención a las necesidades básicas de la gente.
El obispo emérito de Caacupé, monseñor Claudio Giménez, alertó sobre la falta de formación en valores dentro de los hogares.“Si no se ayuda a los hijos a respetarse mutuamente, cuando lleguen a mayores y ocupen cargos importantes será demasiado tarde para pedirles que vivan en paz, que se reconcilien y que se respeten como ciudadanos y como hijos de Dios”, resaltó durante la misa central de Caacupé.
El obispo de la diócesis de Caacupé, monseñor Ricardo Valenzuela ofreció una profunda reflexión sobre la vida moderna, el sentido del trabajo y la importancia del equilibrio espiritual. “El hombre de hoy sufre porque ha perdido lo esencial para actuar, y ha llegado a ser esclavo del propio trabajo”, resaltó. Fue durante la misa central en el santuario de la Virgen Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé.