TORONTO (CANADÁ). A partir de hoy los teléfonos BlackBerry con los sistemas operativos 7.1, 10 o PlayBook OS 2.1, o los que son previos, dejarán de funcionar tras la decisión de la compañía canadiense de cesar el servicio de estos aparatos.
BlackBerry lanzó su primer dispositivo con sistema Android, poniendo el futuro de la compañía en un smartphone con diseño moderno llamado Priv que cuenta con una impresionante cantidad de funciones y un precio de venta alto. BB apuesta a este equipo con gran pantalla curva, el despliegue de aplicaciones de Android y la combinación de un teclado físico que se desliza por debajo de la pantalla táctil.
Blackberry aspira vender 5 millones de dispositivos al año, lo que le permitiría continuar la producción de teléfonos móviles. Una meta ambiciosa, considerando que ha cerrado recientemente un trimestre decepcionante. Ha vendido 800.000 dispositivos BlackBerry y ha sufrido una caída de un 47% en los ingresos fiscales del segundo trimestre.
BlackBerry está a punto de lanzar un teléfono emblemático de tipo slider llamado Priv, que utilizará el sistema Android junto con “lo mejor de BlackBerry en seguridad y productividad”. El dispositivo está pensado para antiguos usuarios de BlackBerry que echan de menos el teclado físico pero desean las aplicaciones de Android. La empresa ha expresado que su apoyo a Android no impide que siga “comprometida con el sistema operativo BlackBerry 10 y ha confirmado su intención de ofrecer actualizaciones.
BlackBerry lanzó una gran actualización de su software, que permitirá que los usuarios de toda su gama de dispositivos BlackBerry 10 puedan acceder a las aplicaciones de Android y a otras como Blend. La compañía dijo que el BlackBerry 10 OS 10.3.1 da a los usuarios la capacidad de entrar tanto a la tienda de aplicaciones BlackBerry World como a la Amazon Appstore, que permite acceder a una serie de aplicaciones de Android antes ausentes de la plataforma de BlackBerry.
BlackBerry y Boeing trabajan en un smartphone superseguro, que no pueda ser utilizado por nadie que no sea su propietario.