10 de diciembre de 2025
En el día de la Virgen de Caacupé, los obispos del Paraguay pusieron nuevamente énfasis sobre los principales problemas que afectan a nuestro país, resaltando en numerosas referencias los efectos de la corrupción y la necesidad de adoptar medidas para combatirla por sus efectos nefastos sobre nuestra sociedad. El oficiante principal, el obispo local, monseñor Ricardo Valenzuela, enfatizó en su homilía que los gobernantes deben atender siempre el bien común. Sostuvo que sus acciones deben fundarse en la honestidad y en el espíritu de servicio, sobre todo hacia los más vulnerables, para que tengan una vida digna. “Ello exige erradicar la corrupción, una de las grandes causas del triste estado de un país, como el nuestro, ...”, agregó. Por su parte, los obispos del Paraguay emitieron una Carta Pastoral sobre el Bien Común, una de las más enjundiosas de los últimos años, en la que hicieron un repaso de los temas más candentes de la actualidad y sugirieron algunas líneas a seguir.
El cardenal de Paraguay, Adalberto Martínez, abogó este jueves por una justicia “independiente e imparcial”, el equilibrio en los Poderes del Estado y condenó la corrupción, a la que consideró “la fuente que atenta contra el bien común”, durante una homilía por las festividades en honor a la Virgen de Caacupé, la patrona del país.
El presidente Santiago Peña, al salir de la misa de Caacupé, habló sobre los duros cuestionamientos relacionados con el mal servicio en el sistema público de Salud y la corrupción. Admitió ambos “problemas”, pero intentó justificar su gestión. No habló de los “sobres del poder” ni de los múltiples cuestionamientos por sus vínculos empresariales en licitaciones.
No es de extrañar que, en el novenario en honor a la Virgen de Caacupé, el obispo de la diócesis de Villarrica, monseñor Miguel Ángel Cabello, se haya ocupado ayer amplia y rigurosamente del calamitoso estado de la salud pública, porque es una de las preocupaciones fundamentales de gran parte de la población, especialmente de la más necesitada. Se trata de una situación intolerable, causada por la corrupción, el derroche, la ineptitud y la indiferencia de las autoridades competentes. “Los mismos profesionales de la salud se quejan, se sienten decepcionados e impotentes al no poder dar respuestas a los pacientes que se acercan con esperanza de curación a las instituciones públicas de salud”, sostuvo. Y agregó que “...solemos escuchar que existen negociados en estos ámbitos”, sobre lo que lamentó que “enriquecerse aprovechándose de las necesidades de la gente, como la salud, es no solamente injusto, sino cruel, criminal, abominable”.

En un hecho insólito, el Ministerio Público (MP) ordenó en Ciudad del Este “otorgar resguardo, seguridad y protección” a dos hermanos policías en situación de baja que denunciaron que otros cinco hermanos policías quieren matarlos por el robo de una carga de 60 kilos de cocaína. La Policía Nacional (PN) dispuso automáticamente el traslado a Asunción de todos los aludidos, quienes trabajan justamente en el departamento Antinarcóticos.

El concejal Álvaro Grau cuestionó el presupuesto plurianual aprobado en Asunción, al que considera “ilegal” y financieramente inviable. Habló además sobre una municipalidad “quebrada”, sin fondos para jubilaciones, bonos ni servicios básicos, y aseguró que la única salida real es un recorte masivo de funcionarios.