Una de las principales quejas de los visitantes de San Bernardino es la gran cantidad de cuidacoches en la zona, que cobran precios excesivos y hasta irrisorios, pidiendo incluso 100.000 guaraníes por dejar estacionado el vehículo en la vía pública. Los cuidacoches locales culpan a personas que vienen desde otras zonas, como la Chacarita, para cobrar precios excesivos e incluso amedrentar tanto a conductores como a otros trabajadores.
Vicente Gómez, presidente de la Asociación de Cuidacoches de Asunción, denunció que hay muchos infiltrados en sus filas que piden G. 50.000 a G. 70.000 extorsionando a los ciudadanos que estacionan sus vehículos en la calle. Aseguró que son un apoyo para la Policía Nacional.
Los cuidacoches anuncian que se preparan para “trabajar” durante la jornada de la final de la Copa Sudamericana y en este contexto, desde la Policía Nacional aún no presentaron su operativo oficial, pero adelantaron el acuartelamiento del 100% de los uniformados. Respecto a cómo procederán ante la presencia de cuidacoches, la respuesta fue bastante tibia.
La Policía Nacional está llevando adelante un importante operativo “anticuidacoches” y ya logró la detención de cerca de 50 personas, entre las cuales tres tenían órdenes de captura. El comisario Juan Agüero, director de Seguridad de Asunción, señaló que estas acciones forman parte de un plan de seguridad que se inició para el partido entre Paraguay y Argentina el pasado jueves, y sigue dando resultados positivos. Instan a los ciudadanos a denunciar los casos de extorsión por parte de estas personas.
La ciudad de Asunción registra cerca de 500 cuidacoches, según datos del municipio. Los trabajadores informales esperan que el intendente Óscar “Nenecho” Rodríguez y el Ministerio de Trabajo cumplan la promesa de inclusión al mercado laboral formal. En junio de este año se presentó la metodología a ser utilizada; sin embargo, no hay avances, denuncian.
El fiscal Alejandro Cardozo, quien investiga el esquema de presunto tráfico de armas en la operación Andina, destacó que el cuidacoches que figura como propietario de una de las firmas investigadas llegó a comprar 1.847 armas en un periodo de un año y medio. En total, movió alrededor de G. 9.500 millones, pero, según los datos iniciales, seguía lavando autos en la zona céntrica de Asunción.