15 de abril de 2025
El ambicioso programa Hambre Cero, del que tanto se enorgullece el Gobierno cartista de Santiago Peña, está resultando todo un fiasco, según lo ha confirmado la misma Contraloría General de la República (CGR) en un contundente informe que entregó al Congreso, tras visitar 300 centros educativos de todo el país entre noviembre de 2024 y marzo de este año: entre otras carencias, el almuerzo escolar no alcanza para todos los alumnos y está incompleto, quienes lo reciben deben usar los pupitres como mesadas y faltan cucharones para servirlo, así como heladeras para conservar los ingredientes, piletas para lavar los utensilios, basureros para los residuos, cocineros y personal de limpieza.
Por un lado, las buenas noticias desde el punto de vista económico en 2024 fueron la continuación del ciclo de crecimiento, el sostenido control de la inflación, la reducción del déficit fiscal y el otorgamiento del grado de inversión por parte de una de las tres grandes calificadoras internacionales de riesgo. Las malas, por el otro, tienen que ver con la completa ausencia de reformas estructurales que aseguren la sostenibilidad de las finanzas públicas, reduzcan la informalidad y la corrupción, mejoren la calidad de los servicios públicos y el clima de negocios, y eleven el potencial de la economía nacional. Sin estas reformas, Paraguay no puede aspirar al desarrollo.
La participación de abogados vinculados a casos de corrupción y lavado de dinero en una cena oficial de GAFILAT en Paraguay genera polémica. Liliana Alcaraz, presidenta pro tempore del organismo, admitió que la financiación fue privada, pero se desconoce quiénes son los aportantes y si están bajo investigación. La SEPRELAD y el Gobierno deben rendir cuentas sobre los recursos utilizados en este evento clave contra el crimen financiero.
La Cámara de Diputados sancionó el martes último el proyecto de ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) 2025 con autoaumentos y beneficios extraordinarios previstos para todos los parlamentarios, incluyendo excepciones para no cumplir con leyes que establecen racionalización de gastos y concurso público, dando vía libre a los “nepobabies”. Por su parte, el presidente de la República Santiago Peña (ANR-HC) ya había adelantado que no vetará la ley. Así, los diputados, en mayoría, optaron por dar la espalda al reclamo de la ciudadanía y sancionar la versión del presupuesto de Senadores, dando por terminada la discusión sobre el presupuesto 2025. El proyecto sancionado pasará a consideración del Poder Ejecutivo para su promulgación.
El jueves último la Cámara de Senadores aprobó el proyecto de ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) 2025 en la versión bicameral, con modificaciones de comisiones para incluir autoaumentos de G. 6.000.000, creación de cargos y otros beneficios, además de puentear la Ley Godoy, que da vía libre a los nepobabies. Los senadores cartistas y satélites hicieron oídos sordos a los reclamos de la gente y priorizaron la inclusión de sus beneficios extraordinarios dentro del PGN 2025, por encima de las abrumadoras carencias en salud pública, educación y otras sentidas necesidades de la gente.
Fue el internismo colorado el que permitió que la práctica saliera a la luz.