19 de septiembre de 2025
La tercera entrega de la saga “El Conjuro” lleva el terror de vuelta a los cines con una trama que se basa en el juicio de Arne Johnson, un famoso caso de 1981 en el que la defensa utilizó como argumento la “posesión demoníaca”.
La primera entrega de “El Conjuro” sin la audaz dirección de James Wan llega con resultados mixtos, con una historia ocasionalmente entretenida y con ideas interesantes que en otros instantes se hace tediosa y por lo general falla en sus intentos de asustar.
Los “spin-offs” de “El Conjuro” se toman cada vez menos en serio, lo que no es algo necesariamente malo como prueba la nueva entrega de “Annabelle”, que se asemeja a una versión cinematográfica de una “casa embrujada” de feria.