BRUSELAS. El universo de “El Principito” se traslada a Bruselas en una exposición que envuelve a los visitantes en su mundo de inocencia con espacios de realidad aumentada, esculturas táctiles fluorescentes y talleres interactivos que dan alas a la imaginación de los niños e invitan a los adultos a reencontrarse con su yo de la infancia.
PARÍS. Los fans de “El Principito” tienen un motivo para visitar París: el Museo de Artes Decorativas dedica la mayor retrospectiva en la historia de Francia al libro de Antoine de Saint-Exupéry, una pequeña obra de arte que ha traspasado fronteras y cuyos dibujos originales pueden ser ahora vistos por primera vez.
Las aventuras de “El principito” serán presentadas con títeres, a partir de mañana en el Teatro Latino (Tte. Fariña c/ Iturbe).
El sentimiento, los gustos y el corazón son lo que realmente importa de una persona, sin mirar la apariencia o la posición económica. “El Principito”, el niño tierno e inocente nos enseña a valorar lo esencial que no se puede ver, pero sí percibir.
La historia del niño de cabellos de color trigo que amaba a su rosa más que a nada en el mundo es magia que llega al corazón. ¿Recordás la frase “lo esencial es invisible a los ojos”? Esta es una de las enseñanzas que nos dejó “El Principito”.