28 de abril de 2025
“Nos dijo a todos que lo apoyemos para que podamos seguir haciendo lío, eso es lo importante, que hacer lío quiere decir inclusión social”, manifestó una de las hijas de la paraguaya Esther Ballestrino de Careaga, detenida desaparecida en 1977 en la Argentina, y quien fue su primera jefa y maestra de vida del papa Francisco, quien les recibió por casi 20 minutos. El emotivo encuentro con Mabel y Ana María Careaga se llevó a cabo ayer a la mañana en la Nunciatura, antes de que el Santo Padre se dirija con destino a San Lorenzo. “Ella fue quien me enseñó a pensar”, les dijo el Pontífice, comentó Ana María, quien fue secuestrada y luego liberada tras cuatro meses de detención ilegal y torturas, pero Esther fue secuestrada el 8 de diciembre de 1977, junto a otras madres y dos religiosas, y nunca más apareció con vida. Sus restos, rescatados de un cementerio donde fue sepultada anónimamente, pudieron ser identificados recién en el 2005.