ARGENTINA. El máximo tribunal declaró “inadmisible” la recusación presentada y dejó firmes las sentencias dictadas por la Cámara de Casación Penal de Buenos Aires, a los responsables de la muerte de Fernando Báez Sosa, hijo de paraguayos residentes en el vecino país. Aunque se eliminó la alevosía como agravante, la premeditación se mantuvo, por lo que las penas no sufrieron modificaciones
BUENOS AIRES. Máximo Thomsen, uno de los cinco condenados a prisión perpetua por el asesinato de Fernando Báez Sosa en 2020 en Argentina, rompió ayer el silencio y brindó una entrevista televisiva por primera vez desde su entrada a la prisión. Confesó que participó en el ataque al joven hijo de paraguayos y dio todos los detalles de lo sucedido.
Máximo Thomsen, tras ser señalado como uno de los principales implicados en el homicidio de Fernando Báez Sosa y recibir una condena a cadena perpetua por el Tribunal de Casación Penal, ha manifestado su deseo de hacer una nueva declaración ante la justicia. Su objetivo es compartir detalles previamente no expresados sobre el incidente ocurrido en enero de 2020.
La Cámara de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires confirmó la condena para los ochos rugbiers por el crimen de Fernando Báez Sosa. Cinco de ellos recibieron prisión perpetua y los restantes tres, una pena de 15 años.
La compatriota Graciela Sosa recordó ayer a su fallecido hijo, Fernando Báez Sosa, por su cumpleaños. El joven debía haber cumplido 23 años pero en 2020 fue asesinado por un grupo de rugbiers, quienes ya fueron condenados por el hecho. “Qué triste es estar sin ti”, es uno de los saludos que compartió la madre.
Durante la misa interreligiosa convocada por la familia de Fernando Báez, el joven brutalmente asesinado a golpes por un grupo de jugadores de rugby, su madre, Graciela Sosa, pronunció un desgarrador discurso que dejó claro que el dolor por la pérdida sigue intacto y que el deseo de justicia permanece inamovible.