14 de julio de 2025
A partir del lunes 14 de julio, obras de restauración iniciarán en el Incan, se anunció desde la Dirección General. El doctor Amado Alfonso, director médico, afirmó que se trata de obras de mejoramiento en varias áreas, que culminarán en unos 6 meses y costarán casi US$ 6 millones. La atención en el Incan no se verá afectada, aseguran.
Pacientes oncológicos del IPS, afectados por la permanente falta de medicamentos, piden una solución urgente a las carencias del seguro social. Critican al presidente de la República, que en dos años de gestión todavía no brindó una solución real al problema, pero se ufana de mejoras sanitarias. En su informe de gestión, Santiago Peña habló de un “Paraguay Sano”, pero los pacientes deambulan buscando medicinas y atención.
A casi cuatro meses de la presentación del proyecto de ley que busca aumentar los recursos destinados a medicamentos para pacientes con cáncer del Instituto Nacional del Cáncer (INCAN), el cartismo mantiene su silencio. Esto ocurre a pesar del llamado público del presidente Santiago Peña, quien pidió frenar el tratamiento de la norma tras una disputa interna dentro del oficialismo, que terminó priorizando intereses partidarios por sobre las necesidades urgentes de los enfermos oncológicos.
El Instituto Nacional del Cáncer (Incan) habilitó el nuevo sistema de gestión de turnos y desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) publicaron un video en el que muestran y explican cómo funciona el nuevo sistema.
Don Santiago Patiño padece cáncer de próstata y realiza su tratamiento en el Incan. Para llegar al hospital y solventar sus gastos médicos, recibe la ayuda de Natividad Cristaldo, una persona de buen corazón que sin ser su familia, se hizo responsable. Para seguir pagando el tratamiento y no dejar desamparado al abuelito, la mujer hace un llamado a la solidaridad.
Es sabido que la salud pública adolece de gravísimas deficiencias causadas por la corrupción, el derroche y la ineptitud. La falta de medicamentos e insumos, así como la de camas de terapia intensiva y la de personal de blanco, entre otros déficits, hacen que el Estado sea incapaz de proteger el básico derecho a la vida. Las constantes denuncias de los pacientes y sus familiares son desoídas por las insensibles autoridades del Gobierno y del IPS, como ha vuelto a evidenciarse en los últimos días, en relación a un proyecto de ley relativo a la compra de medicamentos para el Incan, mediante una reprogramación presupuestaria. Es lamentable que pacientes y familiares deban recurrir a “polladas” para subsanar las carencias que deben ser evitadas mediante la correcta administración de los recursos públicos.