5 de noviembre de 2025

Un nuevo estudio revela que el uso prolongado de melatonina para el insomnio podría estar asociado a un aumento del 90% en el riesgo de insuficiencia cardíaca. Una alerta en la salud pública que abre interrogantes sobre su seguridad.

El insomnio es un síntoma, el cuerpo pide ayuda y a veces no lo escuchamos. Dos especialistas nos guían hacia la búsqueda de las causas, a cuestionarnos que ocurre con esas horas “robadas” al descanso desde perspectivas diferentes.

WASHINGTON. Es bien sabido que lograr una buena noche de sueño se hace más difícil a medida que envejecemos, pero la razón biológica detrás de esto sigue siendo poco conocida. Un equipo de científicos estadounidenses ha identificado cómo el circuito del cerebro involucrado en regular el sueño y la vigilia se degrada con el tiempo en ratones, lo que, dicen, abre el camino para mejores medicinas en humanos.

INSOMNIO.- Aunque hoy aceptamos que lo natural es dormir ocho horas seguidas, antiguamente era costumbre dormir más o menos cuatro horas, despertarse, realizar algunas actividades, a veces comer o visitar a los vecinos durante una o dos horas, y volver a la cama a conciliar el sueño otras cuatro horas más.

El Covid-19 puede ser un detonante en las emociones de las personas, que requiere un acompañamiento profesional. Es comprensible que se desarrollen sentimientos como depresión, ansiedad y estrés durante momentos difíciles, en el contexto de la pandemia por Coronavirus.

El insomnio es la dificultad para conciliar el sueño. Es un trastorno que aparece en mayor o menor medida en momentos específicos de la vida, algunas veces es porque estamos pasando por momentos de stress o ansiedad en niveles importantes para nuestro organismo y psiquis. Este trastorno del sueño se disparó durante la pandemia y el encierro. Acompáñenos y sepa a qué se llama “coronasomnia”.