13 de marzo de 2025
Por impunidad o como “garrote”, el cartismo ha impuesto y respaldado a cuestionados legisladores, catedráticos y gremialistas para que les sean serviles tanto en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) como en el Consejo de la Magistratura (CM), donde estos “matones” tenían el poder de elegir, blanquear y castigar a jueces y fiscales en una red de tráfico de influencias. Pese a la caída de Óscar González Daher, el mismo esquema sigue vigente.