5 de mayo de 2025
Desde patrulleras para la Policía Nacional, pupitres escolares de origen chino, mobiliarios para oficinas de Gobierno, consultorías y hasta equipos de espionaje aparecen como compras financiadas por la Itaipú Binacional entre enero de 2024 y febrero de este año, durante el mandato de Santiago Peña. Todas las adquisiciones se hacen mediante un abierto “baipaseo” de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) y en su mayoría ocultando proveedoras elegidas como los montos. La Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops), Fundación Parque Tecnológico Itaipú (PTI), Fundación Tesãi y la misma binacional aparecen como las encargadas de los procesos. Solo algunos de los contratos publicados arrojan que el despilfarro supera G. 1,4 billones, alrededor de US$ 184 millones.
El titular de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios explicó en cuánto su institución valoró cada unidad de pupitre y silla que importó la empresa Kamamya S.A., adjudicada por la Itaipú Binacional para la compra de más de 300.000 de esos muebles escolares por hasta 97 dólares cada unidad.
Mientras Itaipú pagó hasta US$ 97 por cada set escolar (mesa y silla), el costo total estimado por unidad, incluyendo el precio en China, flete, seguro y despacho, asciende a US$ 32. Esta diferencia revela un sobreprecio de aproximadamente el 62%. El último valor citado se aproxima a uno de los precios que pretendía pagar la municipalidad de Ciudad del Este.
La cuestionada empresa Kamamya S.A., de Long Jiang, utiliza el tinglado municipal de esta localidad para ensamblar los controvertidos pupitres chinos que Itaipú Binacional adquirió por U$S 96 cada uno. La situación evidencia un incumplimiento contractual, ya que la empresa proveedora debía contar con un predio propio o alquilado para el montaje del mobiliario escolar.
En tiempo récord, la DNCP emitió ayer su resolución por la cual ordena a la Municipalidad de Ciudad del Este reformular sus precios referenciales para la compra de pupitres chinos. La decisión es ante la supuesta irregularidad en la elaboración de los valores entre US$ 22 y US$ 35, cuatro veces menos de lo que pagó la Itaipú –entre US$ 94 y US$ 97– por el mismo producto. El ente regulador de compras públicas cuestiona a una empresa privada por su presupuesto. El intendente Miguel Prieto (Yo Creo) denuncia una aparente presión a proveedores del Estado para cambiar los precios.
La Itaipú Binacional publicó el miércoles último que continúa con la entrega de los pupitres chinos. Lo llamativo es que en las propagandas aparecen como “beneficiados” los mismos niños de suministros anteriores. Se acentúa por parte del gobierno de Santiago Peña la grosera utilización de escolares con el fin de acallar denuncias sobre el aparente negociado de alrededor US$ 27 millones.