El imputado diputado Mauricio Espínola (ANR, Fuerza Republicana) aún no fue citado para la próxima sesión de la comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara Baja (fijada para el lunes 24), para dejar asentados sus cuestionamientos contra la Fiscalía, antes de proceder a su desafuero voluntario.
En la Cámara Baja hay cuatro diputados que mantienen sus fueros y no pueden ser procesados por la Justicia, lo que refleja el corporativismo de los políticos.
“Es una parodia que termina de dinamitar la escasa credibilidad de la Fiscalía”, dijeron ayer los abogados Carlos César Trapani y Enrique Kronawetter, representantes legales del expresidente Mario Abdo Benítez, quien puso a disposición su fuero de senador vitalicio para someterse en la causa de la Fiscalía por supuesta revelación de secretos, tras una denuncia de Horacio Cartes. Señalaron que la Fiscalía es “aparato del terror”.
El senador Rafael Filizzola, del Partido Democrático Progresista (PDP), afirmó que corresponde que el ex presidente Mario Abdo Benítez sea escuchado antes que el pleno de la Cámara de Senadores le quite los fueros de senador vitalicio.
Furiosos por no tener los votos para retirarle los fueros a Mario Abdo Benítez en abril de 2024, los cartistas y sus satélites violaron la Constitución y repusieron los fueros a Erico Galeano y Hernán Rivas, generando una grave crisis. Ahora que el mismo Abdo Benítez pidió ser desaforado, extrañamente el cartismo parece dubitativo.
El diputado Daniel Centurión (ANR, Fuerza Republicana) cree que el cartismo no se esperaba que el expresidente Mario Abdo Benítez solicitara su desafuero para enfrentar la causa en su contra, abierta en base a la denuncia del exmandatario Horacio Cartes. Agregó que a partir de ahora, Cartes se ve forzado a emularlo para aclarar las sospechas que pesan sobre él. Remarcó que el mensaje de Abdo también apunta al exterior.